Un Mirandés sin puntería deja al Racing salir vivo de Anduva

El inicio del partido del conjunto jabato fue electrizante. Rubén Sánchez puso un centro para la cabeza de Javi Martón que obligó al cancerbero Ezkeita a sacar la mano para evitar el primer gol a los 45 segundos del pitido de Ávalos Barrera.

La banda derecha fue la parte débil del Racing de Santander, circunstancia que aprovechó el Mirandés otra vez en el minuto diez. Ilyas centró al segundo palo, donde apareció Gabri, cuyo remate tuvo que sacarlo casi de la línea de gol el central Rubén.

El encuentro estaba siendo intenso, pero de claro dominio rojillo. Álvaro Sanz, pasada la media hora de la contienda, lanzó una falta directa desde el costado izquierdo del ataque y Ezkeita estuvo rápido para abortar el tanto mirandés.

Cuando se llegaba a las postrimerías de la primera mitad, hubo intercambio de oportunidades. En esta ocasión, Javi Martón fue el centrador y Rubén Sánchez el rematador, en un balón que se marchó desviado de la portería racinguista. A continuación, Arana pudo anotar el 0-1 con un tiro cruzado, aunque intervino Ramón Juan con acierto.

Nada más comenzar la segunda mitad, el Racing de Santander estuvo a punto de marcar. Peque recibió la pelota cerca de la media luna del área y tras un esprint disparó con suavidad y el balón fue a parar al poste derecho.

La respuesta del Mirandés fue inmejorable. Un centrochut de Ilyas lo desvió Pol Moreno. A continuación, cabezazo de Javi Martón al poste izquierdo, tras lo que recogió Reina, que remató desde el suelo y una vez más obligó a intervenir a Ezkieta. Para seguir con el acoso sobre la portería santanderina, Reina combinó con Gabri y de nuevo el guardameta racinguista desvió el suave tiro del atacante del equipo jabato.

A partir de aquí, el Racing de Santander se fue hacia adelante y eso obligó a Ramón Juan, en el minuto 61, salir de su meta para abortar la opción de marcar por parte de Arana. A renglón seguido, Gabri hizo un gesto antideportivo al escupir a Mantilla, pero ni árbitro ni sus asistentes ni el VAR lo apreciaron.

Cuando faltaba un cuarto de hora para el final, un pase largo para Ekain acabó con un chut que desvió el cancerbero del Mirandés con el antebrazo. Tras mucho esfuerzo físico fue curiosamente Grenier, que salió desde el banquillo, el que sufrió una lesión en el gemelo y fue sustituido por Morante con el choque a punto de terminar. A la conclusión, empate que deja más insatisfecho por sus merecimientos al plantel que dirige Alessio Lisci.