Goleada sonrojante para un Mirandés vapuleado por el líder

El elenco de Lisci había cortado la jornada pasada una racha de cuatro derrotas seguidas, pero se le presentaba un reto mayúsculo, y salió valiente al césped de Butarque. Como era de esperar, fue el Leganés quien asumió la responsabilidad de llevar el peso del encuentro. Pero el Mirandés, con el esquema de tres centrales, aguantó en bloque medio para presionar cuando el balón llegaba a las bandas.

La primera ocasión del partido fue para el conjunto rojillo. Pablo Ramón sorprendió rompiendo en ataque y encontró con un pase atrás a Ilyas. El extremo marroquí recortó buscando portería y el disparo con la izquierda salió cerca de la escuadra. La respuesta del cuadro pepinero llegó al cuarto de hora en un córner. Tras una serie de rebotes, el balón le llegó a Miguel en el segundo palo, pero Ramón Juan salió bien para achicar espacios y repeler su remate en boca de gol.

A la siguiente no perdonó el Leganés. Juan Cruz recibió en la banda derecha, desbordó por fuera y colocó un centro medido al primer palo. Ahí apareció Diego García, libre de marca, para cabecear a gol y hacer el 1-0. En los siguientes minutos, los pupilos de Borja Jiménez, viejo conocido de la afición mirandesista, fueron muy superiores y, aunque no llegaron con excesivo peligro, la sensación era que el segundo tanto podía llegar en cualquier momento.

Y lo hizo en el minuto 35, tras una buena acción por la banda izquierda que Miguel puso en las botas de Franquesa. El lateral zurdo puso un centro a Diego García que, sin que Barbu pudiese cortar el pase, empujó a gol para hacer su doblete particular. En la siguiente jugada pudo recortar diferencias el cuadro de Lisci. Carlos Martín le robó el balón a Nyom en área rival, jugó para La Gumina con un pase de la muerte, pero el italiano abrió demasiado el interior del pie y su remate no encontró portería.

Antes del descanso, el líder sentenció el encuentro. Juan Cruz recibió entre líneas un buen pase y no dudó en buscar portería. Su disparo, pegado al palo izquierdo de la portería de Ramón Juan, fue imposible de atajar para el guardameta barcelonés.

Con cuatro disparos a puerta, el Leganés hizo valer la efectividad que le mantiene líder de la categoría de plata para darse un festín y dejar muy tocado a un Mirandés que volvió de los vestuarios con un cambio, Tachi por Lachuer, e intención de meterse en el partido. Un centrochut de Ilyas y un disparo lejano de Reina, que desvió la defensa cuando iba a coger portería, fueron las únicas ocasiones de peligro antes de que llegara la sentencia, si no estaba aún firmada.

Porque ese arreón inicial del conjunto rojillo duró poco. Ramón Juan evitó el 4-0 con una gran estirada a remate de Miguel, pero poco pudo hacer en la siguiente jugada. El propio delantero cedido por el Alavés recibió un pase en profundidad de Diego García y, tras regatear al meta del Mirandés, definió a portería vacía. El árbitro señaló fuera de juego, pero el VAR corrigió al trencilla y dio validez al tanto.

El final del partido, sin apenas interés, estuvo marcado por la lesión de Luna en un choque de cabezas con Tachi, quien se hizo una brecha y pudo continuar. El peor parado fue el canterano. Tuvo que ser retirado en camilla cuando apenas llevaba quince minutos en el campo.