Secciones
Servicios
Destacamos
Decepcionada por haber dejado pasar el tren del liderato en solitario de la Liga, la plantilla del Real Madrid regresó a los entrenamientos este domingo con la vista puesta en el decisivo duelo del miércoles ante el Galatasaray en la Champions. Una competición ... que se adapta mejor a su ADN que el torneo doméstico, donde se penaliza esa irregularidad que sigue siendo el pan de cada día en Chamartín y que si no ha pasado mayor factura al equipo de Zinedine Zidane ha sido sólo por la inconsistencia que están mostrando también Barcelona y Atlético. Pero ya se sabe que mal de muchos es consuelo de tontos y en Valdebebas asumen que sin mayor fiabilidad será imposible pelear por el título que situó como objetivo primordial su técnico.
Se le resiste al Real Madrid la continuidad en los resultados, incapaz de enlazar tres victorias seguidas desde marzo cuando el Barça venía de sumar siete hasta ver cortada la racha el sábado por el Levante y otros equipos de la zona alta como Atlético, Granada y Real Sociedad han logrado ya encadenar un trío de triunfos en algún momento de la temporada.
Los blancos dan una de cal y otra de arena, pasando de endosarle una manita al Leganés a quedarse sin marcar ante el Betis pese a que los verdiblancos llegaban al Santiago Bernabéu como el equipo más goleado de Primera. Pero Rubi blindó a su escuadra con tres centrales y un cuarto reconvertido en mediocentro y salió indemne del coso de La Castellana, donde el Betis lleva imbatido tres visitas sucesivas, hito histórico en la categoría.
La mala puntería volvió a ser una rémora para el Real Madrid, que remató 22 veces, siete de ellas entre los tres palos, sin poder rebasar a Joel, héroe verdiblanco con paradas de mérito ante Benzema, Sergio Ramos o Vinicius y superado únicamente por Hazard en una acción que invalidó el VAR por fuera de juego.
Por primera vez firmaron los blancos un 0-0 en el Santiago Bernabéu en la era Zidane, que se escudó en la pólvora mojada de los suyos para explicar el tropiezo en una jornada en la que la derrota del Barça y el empate del Atlético había dejado el camino expedito para que su equipo tomase el mando de la Liga.
Más información
«Sólo nos ha faltado el gol», lamentó el francés, cauteloso a la hora de valorar la acción de Feddal que indignó al madridismo. «Vi la mano pero luego está la interpretación del árbitro. No hay que mirar mucho por ahí. El criterio es el árbitro porque no ha consultado ni el VAR. Ha tomado la decisión y hay que respetarla», atajó el técnico, mucho más comedido que Emilio Butragueño, al que le tocó el papel de azote. «Es una jugada que la mano interrumpe la jugada y no sé por qué el VAR a veces va en una dirección y a veces en otra», reprochó el director de Relaciones Institucionales del Real Madrid.
Llueve sobre mojado en la 'casa blanca', donde recuerdan el agarrón a Brahim en los minutos finales del choque en Son Moix que significó la primera derrota del Real Madrid en la presente Liga. Entonces Salva Sevilla sujetó al malagueño de forma reiterada a la salida de un córner sin que el colegiado de aquel partido, Alberola Rojas, ni el árbitro del VAR, Iglesias Villanueva, vieran nada punible pese a que las imágenes televisivas dejaban poco espacio a la interpretación, como tampoco señalizó el colegiado castellano-manchego un agarrón de Raíllo a Sergio Ramos y un derribo de Lago Júnior a Casemiro en una jugada ya invalidada por fuera de juego previo de Casemiro que no existía.
La lista de agravios alcanza también a una entrada no pitada por Gil Manzano de Albiol a Vinicius en el encuentro ante el Villarreal de la tercera jornada. Lances controvertidos que han restado entre cinco y siete puntos, según la contabilidad que hacen en Chamartín.
Las polémicas arbitrales no pueden opacar el gran margen de mejora del equipo de Zidane, que sorprendió al relevar a Benzema por Jovic cuando los blancos más necesitaban al '9', el único que ve puerta con asiduidad. El técnico dio descanso a Valverde para rodar a Modric y su escuadra echó de menos la energía del uruguayo. La segunda línea tuvo menos llegada y al Madrid no le bastó con Hazard, cada día más cerca de aquel futbolista que destrozaba rivales en el Chelsea con su demoledor cambio de ritmo.
La mejoría del belga y de su compatriota Courtois, que dejó inmaculada su portería por tercer partido seguido y comienza a asemejarse a la versión que le llevó a ser Guante de Oro del último Mundial, son motivos para la esperanza en Chamartín, aunque Zidane sigue sin recuperar a Vinicius, ansioso y desubicado en la banda derecha.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.