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El burgalés Pacheta acaba de subir a Primera División. Carlos Espeso
Pacheta: «Siempre tendré la espinita de no haber jugado con el primer equipo del Burgos»

Pacheta: «Siempre tendré la espinita de no haber jugado con el primer equipo del Burgos»

El burgalés José Rojo 'Pacheta' vuelve a Primera División de la mano del Real Valladolid tan solo dos temporadas después de hacerlo con el Elche

Ruth Rodero

Burgos

Domingo, 5 de junio 2022, 09:28

El pasado domingo era prácticamente imposible rivalizar en felicidad con José Rojo Martín 'Pacheta'. Su equipo, el Real Valladolid, acababa de ascender a Primera División después de haber comenzado la jornada como tercer clasificado y sin depender de sí mismo. Su victoria y la ... derrota del Eibar en Alcorcón obraron el milagro. Pero no es esta la primera vez que Pacheta lo consigue. En 2020 ascendió con el Elche. En 2021 descendió en la última jornada con la UD Huesca en un partido en la que sí dependían de ellos mismos y, cuando todos preparaban el play off 2022, llegó el ascenso.

Ahora llega el momento de descansar en su tierra, en Salas de los Infantes, y este burgalés de pro lo hace rememorando los mejores momentos de esta temporada y de su pasado como jugador.

-Lo primero de todo, enhorabuena por el ascenso. ¿Cómo está después de haber conseguido lo que era casi imposible en ese último partido de Liga?

-Estoy feliz, estoy contento y disfrutando este momento. En el fútbol, como en la vida, hay momentos muy, muy, muy placenteros y hay momentos muy desagradables y lo que tienes que hacer es ser consecuente con ellos y los unos disfrutarlos y los otros asumirlos. Así que en ese proceso estamos, ahora ya planificando la siguiente temporada.

- «Hemos venido a ascender», esa fue la frase con la que se presentó en Valladolid. Dicho y hecho. ¿No fue muy arriesgado tirarse así a la piscina?

-No. Es que a mí me fichan para esto. A mí no me ficha el Real Valladolid para ver si podemos ascender. No. A mí me fichan para esto. Entonces, si no consigo el objetivo puede haber sido una temporada fantástica, porque 81 puntos pues es una temporada muy buena, pero si no te da pues no has conseguido el objetivo y, entonces, tendrías que ir al play off. Pero yo estaba convencido de que podríamos hacerlo, porque el club me puso una serie de jugadores en los que hemos confiado y ellos han creído en ellos y en la idea. Entonces, yo estaba convencido de ello. Que no lo consigues, vale, pero no voy a venir al Real Valladolid a especular. No. Para nada.

«Estaba convencido de que podríamos hacerlo, porque el club me puso una serie de jugadores en los que hemos confiado y ellos han creído en ellos y en la idea»

-¿Cómo se viven esos 10 minutos finales en los que un gol lo cambia todo? ¿Cómo hace un entrenador para mantener la calma y para intentar, al menos, que sus jugadores no pierdan la concentración?

-Del 80 al 90, que nosotros ya vamos ganando 3-0 y el partido nuestro ya está controlado y estás pendiente de los otros partidos, hay una serie de minutos que el futbolista está jugando pero está preguntando «¿cómo estamos?, ¿cómo va?». Nosotros en esos momentos éramos campeones, porque con los resultados de Eibar y Almería estábamos empatados los tres y, claro, la explosión esa en el 91 cuando marca el Alcorcón y el campo canta el gol... Entonces ya son dos goles los que tiene que meter el Eibar para nosotros no ascender. Ahí ya es el momento de explosión en el que el jugador quiere que acabe el partido, no quiere jugar, unos corren para un lado, otros para otro, es muy emocionante. Noches como esta vas a vivir muy pocas en tu vida deportiva. Muy pocas que tú ganes, o que asciendas a Primera División en tu campo, en el último minuto, con todo lo que es durante la semana, con todo lo que es durante el año y que se dé en ese estado mágico del estadio, que es la leche, es una noche inolvidable.

- Como burgalés, imagino que el derbi iba a ser un partido especial, pero ¿fue también uno de los momentos más duros de esta temporada?

-El momento más duro fue esas tres derrotas, sí. Fue un momento extradeportivo también muy duro, pero sí, el momento deportivo más duro fueron esas tres derrotas y desde aquí quiero dar las gracias al director deportivo, a Fran Sánchez, y al presidente y a todo el mundo, a los que mandan, a Matt, (Fenaert, CEO del club) y David (Espinar, director del gabinete de presidencia) porque en esos momentos duros es cuando se ve cómo es el ser humano y su manera de dirigir un club.

«El momento deportivo más duro fueron esas tres derrotas»

-¿Qué recuerdos tiene de su paso por el que entonces era filial del primer equipo en Primera División, el Atlético Burgalés, y de otros más modestos como el Racing Lermeño?

-Yo voy de Lerma y me firma el Burgos. El primer año que me firma el Burgos me voy cedido al Numancia, es el año que me caso y es el año que estoy trabajando en Quintanar de la Sierra en la carpintería. Trabajaba y jugaba al fútbol en Soria. El siguiente año vengo a Burgos para hacer la mili, hago la mili ahí, en automóviles, al lado del Plantío, y entrenaba a días con el primer equipo, pero estuve con el filial. Jugamos el play off de ascenso, tengo grandes recuerdos, pero siempre tendré la espinita de no haber jugado con el primer equipo, sí. Siempre la tendré. Y que luego, bueno, me dio para jugar 350 partidos en el fútbol profesional. Fue una toma de decisiones porque tuve un problema con el entrenador del primer equipo. Yo sabía que acababa contrato y para renovar me tenían que hacer ficha del primer equipo y el entrenador no quería. Tuve un problema con él y me marché. Nos fuimos a Marbella. Las sensaciones que tengo son fantásticas porque el año en el filial, en el Atlético Burgalés, el jugar el play off de ascenso fue fantástico.

- Y, aunque tiene contrato con el Real Valladolid y la posibilidad de comenzar el proyecto en Primera que seguro que le ilusiona, pero ¿se podría quitar esa espinita entrenando al Burgos CF en algún momento?

-Pues, hombre, yo espero que algún día tengamos la posibilidad. Ojalá. ¿El volver a Burgos? Yo nunca voy a saber lo que pasa en el futuro, yo ahora estoy en el Real Valladolid y al final el Burgos es donde yo nací, pero nunca se sabe. Le tengo mucho, muchísimo cariño a Burgos. Muchísimo cariño. Y mucho cariño al Burgos, claro que sí. Nunca se sabe.

-Usted ha alcanzado el éxito con equipos muy importantes como futbolista y entrenador; Elche y Valladolid han sido los dos últimos. Hablando de esa posibilidad de volver algún día, ¿por qué en Burgos es tan difícil alcanzar este éxito?

-Pues tenemos que empezar a cambiarlo. Hay que empezar a cambiarlo, y eso se cambia desde el convencimiento de que puede haber gente válida en Burgos para entrenar, para jugar, para todo. Y eso se hace desde el convencimiento. Es complicado ser profeta en tu tierra, es complicado, pero bueno, yo cuando salgo del Burgos acabamos la Liga con 25 goles. Es Tercera División, ya, ya, pero 25 goles. Y te tienes que ir. Y nos fuimos a Marbella a buscarnos la vida y luego te das cuenta de que podías haber jugado porque a los tres años estás jugando en Primera División en un equipo que es el tercero de España que más temporadas lleva en Primera División, como es el Real Club Deportivo Espanyol. Algo mal se ha hecho.

«Ahora estoy en el Real Valladolid y al final el Burgos es donde yo nací, pero nunca se sabe. Le tengo mucho, muchísimo cariño a Burgos. Muchísimo cariño. Y mucho cariño al Burgos, claro que sí. Nunca se sabe»

-Han compartido categoría esta temporada, imagino que habrá seguido la trayectoria del Burgos en su vuelta al fútbol profesional.

-Claro. Y tiene muchísimo mérito lo que ha hecho el Burgos, al igual que el Ibiza. Recién ascendidos y que hayan estado todo el año viviendo en una zona más cómoda que apretada eso no es nada fácil, pero nada fácil. Y desde aquí, mi admiración por el Burgos, mi admiración porque no es nada fácil lo que han hecho. Qué va, qué va. Y es fundamental el ambiente de El Plantío, fundamental. Que la gente vaya convencida de animar, de animar y de animar. Eso es fundamental. Y eso lo ha tenido el Burgos CF este año. Y además, ahora, la toma de decisiones es de proyecto continuista, que es estupendo y eso, generalmente, da premio.

-Su familia es de tradición futbolera y varios hermanos y sobrinos suyos han sido o son futbolistas. Pero Salas ha dado grandes deportistas también como Pedro Montero (Real Burgos y UD Salamanca), José Manuel Molinero (Real Burgos, Andorra, Sestao y CF Palencia), Fernando Fierro (Burgos y Valladolid)… ¿Qué tiene Salas de los Infantes para ser tan buena cantera?

-Pues que jugábamos en la era. Éramos autodidactas y estábamos todo el día jugando al fútbol. Ahora los niños juegan las horas que van a la academia o en su equipo. Juegan dos horas al día. Nosotros jugábamos ocho horas al día al fútbol. En el colegio, cuando salías, cuando estabas, todo el día, y eso creo que tenemos que acercarlo, ya que igual no podemos acerca el fútbol a la calle tendremos que llevar la calle al fútbol, llevarle a las academias el jugar con niños más mayores, que te den una colleja y que aprendas, que evoluciones, y que veas que si juegas con un chico más mayor tienes que agudizar el ingenio. Todo esto hace que el ser humano, que el futbolista, le vaya buscando soluciones a un montón de problemas que no te las van a dar las academias. Yo echo en falta la toma de decisiones y la pasión por este juego en muchos de los chicos que van llegando ahora. Eso es lo que echo en falta, sí.

-Cada entrenador tiene su librillo, pero en Elche tuvo un equipo de lucha y brega, no exento de calidad, y en el Real Valladolid ha tenido futbolistas de Primera División, de una enorme calidad. ¿Cuál es su librillo?

-Adaptarme yo a ellos. Yo no podría imponer nada. Yo tengo que adaptarme al futbolista e intento adaptarme a sus características, a sus condiciones. Me dicen, ¿y qué te gusta más, 4-4-2, 5-3-2? Que no tengo nada. Pongo al que está bien en un momento dado. ¿Hay que jugar con tres centrales? Jugamos con tres centrales, ¿hay que jugar con dos? Jugamos con dos. ¿Hay que jugar con tres medios centros? Tres medios centros. ¿Hay que jugar con dos puntas? Dos puntas. Depende del momento del jugador y de lo que tú tienes. No puedes intentar hacer cosas que el jugador, la entidad, o todo el conjunto no va a dar. Entonces te tienes que adaptar a ellos y jugar a lo que son sus virtudes y esconder sus defectos. Y a partir de ahí empezar a generar el ambiente en el que el futbolista crea que lo que va a hacer le ayuda a ganar y le hace mejor. Una vez que tienes eso conseguido por el futbolista es más fácil conseguir los objetivos.

-¿Y Pacheta jugador tendría cabida en la idea futbolística del Pacheta entrenador?

-Me hubiera gustado tener entrenadores como lo que intento enseñar yo al jugador. Los tuve, tuve alguno. Otros no. Pero tuve alguno con inquietud de enseñar, pero me hubiera gustado que me hubieran dicho lo que yo intento hacerle al jugador, que es que ahorre diez años de experiencia con lo que tú intentas enseñarle. Que ahorre esos años que a nosotros nos costó por ser autodidactas y no tener a nadie que te enseñe lo que intentamos enseñar nosotros. Me hubiera gustado que me hubieran enseñado cosas de las que yo enseño a los futbolistas, me hubiera gustado.

- Llega ahora tiempo para descansar, para volver a casa. En Salas le van a poner su nombre al campo de fútbol, ¿cómo se vive eso?

-Me hace una ilusión de la hostia. Me hace mucha ilusión. Mucha ilusión. En mi pueblo, el reconocimiento de tu pueblo, ya me hicieron un homenaje hace dos años con el ascenso del Elche, que fue maravilloso, y ahora me ponen el nombre al campo de fútbol, qué más voy a pedir, que además mi padre lo va a poder disfrutar. Me hace mucha ilusión, sí.

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