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Buenas noticias dentro de lo que cabe para el Atlético de Madrid y el defensa francés Clément Lenglet, que solo sufre sendos esguinces en la rodilla y el tobillo izquierdos producto del fuerte golpe que padeció este domingo en el partido ante el Leganés y que le dejarán aproximadamente un mes en el dique seco.
El jugador, cedido por el Barça hasta final de curso, tuvo que dejar el terreno de juego pasada la hora de choque después de que su compañero Axel Witsel cayese de forma fortuita sobre él, que no le vio venir al encontrarse de espaldas. Aunque en un principio se temió por una dolencia mucho más grave de rodilla, las pruebas a las que se sometió este lunes detectaron un esguince leve en el ligamente colateral interno de la articulación izquierda y algo más fuerte en el ligamento deltoideo del tobillo izquierdo.
«Lenglet comenzará a realizar tratamiento de fisioterapia y trabajo de readaptación y queda pendiente de evolución», se limitó a comentar el club rojiblanco en el escueto parte médico. Este tipo de problemas requieren en torno a unas tres semanas o un mes para la vuelta a la competición, con lo que el internacional de 29 años se perderá los duelos contra el Lille, el Betis, el Vic, Las Palmas, el París Saint Germain y el Mallorca, por ese orden, antes del parón por los partidos de las selecciones nacionales desde el 11 al 21 de noviembre.
Es una de las cinco bajas del Atlético para el importante encuentro de este miércoles en la Liga de Campeones contra el Lille, junto a Marcos Llorente, César Azpilicueta y Robin Le Normand, además de Pablo Barrios, que sufrió otra lesión muscular también ante el Leganés y acabó el partido entre lágrimas de impotencia.
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