LUIS F. GAGO
SEVILLA
Jueves, 19 de septiembre 2019, 07:30
Tras el fracaso de la campaña anterior con Pablo Machín, el Sevilla de Julen Lopetegui quiere resarcirse de su traspié y volver a demostrar por qué es el equipo con mejor coeficiente de la Europa League. Para lograrlo ha cambiado las estructuras y ... la plantilla. Desde la vuelta del director deportivo de los éxitos pasados, Monchi, hasta el técnico y medio plantel. Once fichajes y una veintena de salidas ha realizado el Sevilla este verano para cambiarle la cara a un equipo que no logró demostrar las expectativas generadas en la etapa de Joaquín Caparrós como mandamás de la secretaria técnica.
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Pero la decisión más importante en la planta noble de Nervión fue la contratación del técnico. Tras la salida de Machín por la puerta de atrás, tocaba dar un golpe encima de la mesa. La sorpresa entre la afición sevillista fue cuando la elección final recayó en Lopetegui, exseleccionador nacional y que también fracasó en su aventura en el Real Madrid. No sentó demasiado bien entre la hinchada nervionense la elección, empero el comienzo de la actual temporada está siendo de notable alto y Lopetegui se está ganando a la exigente afición blanquirroja con juego, defensa rocosa y resultados, que es lo que al final importa en este deporte.
Si quiere continuar con esta racha triunfante, el nuevo proyecto andaluz deberá pasar su primera prueba de fuego en la competición fetiche de los sevillistas. La Europa League es el caramelo que ansían todos los aficionados porque el pentacampeón está obligado a competir y, al menos, tratar de ganarla cada año que la dispute.
Para ello es necesario empezar con buen pie en tierras de Azerbaiyán frente al Qarabag, el mejor equipo de un país gobernado por una oligarquía enriquecida tras la caída de la Unión Soviética y que ha hecho del deporte del balompié su emblema internacional para blanquear las escasas libertades y derechos de que goza el país.
El rival de los de Nervión lleva una racha de cuatro victorias consecutivas y tiene futbolistas de nivel medio importante como Zoubir y Emreli. El Sevilla es superior, pero deberá demostrarlo sobre el césped si quiere comenzar con buen pie. Para lograrlo necesita tirar del plan 'B' para empezar a hacer rotaciones y tener a todos sus hombres a tono. Esa será una de las decisiones que marcará el devenir en el banquillo de Lopetegui: continuar con su once gala dejando relegado al resto de jugadores de la plantilla o empezar a darle confianza para tener un amplio abanico donde elegir en una temporada que se antoja larga. La era europea comienza una vez más en la esfera blanquirrojo.
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Venció el Sevilla en su estreno de la temporada 2019-2020 en la Europa League en Azerbaiyán ante el Qarabag. Se llevaron los hombres de Julen Lopetegui los primeros tres puntos en
Rotaciones esperadas en el Sevilla de Lopetegui en su nueva andadura por Europa. En Bakú el entrenador vasco
De ahí que pusiera de titular a
Qarabag
Begovic; Abbas Hüseynov, Badavi Hüseynov, Medvedev. Ailton; Garayev (Ibrahimli, min. 85), Richard Almeida, Míchel; Jaime Romero (De Quintana, min. 77), Gueye (Abdullayev. min. 67) y Zoubir.
0
-
3
Sevilla
Vaclik; Pozo, Koundé, Diego Carlos, Escudero; Jordan (Rony López, min. 58), Gudelj, Mudo Vázquez; Óliver Torres (Dabbur, min. 86), Chicharito (Banega, min. 72) y Munir.
Goles: 0-1: min. 62, Chicharito. 0-2: min. 78, Munir. 0-3: min. 85, Óliver.
Árbitro: Aranovskiy (Ucraniano). Amonestó con tarjeta amarilla a Ailton, Medvedev y Gudelj.
Incidencias: Tofiq Bahramov Adina Respublika Stadionu. Primera jornada de la Europa League 19-20.
Con todo el laboratorio de ideas del técnico sevillista preprado, el Sevilla saltó en Bakú con la intención de empezar con buen pie el camino hacia la 'sexta'. Esta vez con 'Monchi' de vuelta como talismán del pentacampeón, el partido comenzó con aires de superioridad del Qarabag para avisar de que no tenían miedo al equipo con mejor coeficiente de la Europa League. Almeida y Gueye fueron los mejores del equipo local durante la primera parte, aunque fue
Pese a estos acercamientos del equipo de Azerbaiyán, la realidad fue que
Por ese motivo se marcharon los 22 jugadores a los vestuarios con empate a cero pese a que los rojiblancos se merecieron adelantarse. Lopetegui decidió apostar por los mimos para la segunda parte, quizá esperando con demasiada esperanza que algunos de sus hombres demostraran que su apuesta había sido la acertada. En el minuto 62 de partido llegó esa jugada que esperaba el técnico de los andaluces.
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