Otra lección de Joao Félix

El conjunto italiano, vestido de azul y verdugo de los colchoneros en la última edición de la Champions League, empezó dominando el partido de forma contundente. Desde el inicio hasta el ecuador de la primera mitad, el equipo de Maurizio Sarri embotelló al Atlético, que sufrió por las bandas y especialmente, en los saques de esquina. Precisamente, de esto último iba a llegar la primera ocasión de los de Turín, cuando Chiellini recogió un balón suelto dentro del área y obligó a Oblak a hacer su primera intervención en el partido. Posteriormente, Cristiano Ronaldo lo intentó con un disparo desde fuera del área pero Savic se cruzó de manera oportuna para evitar el tanto del portugués.

Sin embargo, cuando peor se encontraba el conjunto de Simeone sobre el terreno de juego, emergió la figura de Joao Félix. El diamante en bruto que ha comprado el Atlético este verano se lució en todos los sentidos. Su manera de bajar al mediocampo para iniciar la jugada, su forma de leer el juego, entre otras facetas, hace que los de Simeone haya adquirido una virtud que no la tenía desde los tiempos de Diego Ribas. El propio portugués abrió el marcador tras aprovechar un gran centro de Kieran Trippier, otro de los fichajes que se está adaptando de manera sobresaliente.

A partir del 1-0, los 'Bianconeri' entraron en un estado de zozobra y el Atlético pudo ampliar su renta pero el destino quiso que un exjugador del Real Madrid apareciese en escena para poner las tablas en el electrónico. El tanto del empate fue de Sami Khedira, que recogió un balón suelto y enganchó un gran disparo raso cruzado en el que Oblak no pudo hacer nada más que mirar como la pelota se colaba al fondo de la red.

Rápidamente, el Atlético desequilibró de nuevo la balanza a su favor. Tres minutos después del tanto de la igualdad, Thomas Lemar, que participó de manera involuntaria en el primer tanto desviando el tiro del '7' rojiblanco, realizó un sensacional envío largo desde la mitad del campo que aprovechó Joao Félix desmarcándose de De Ligt y Chiellini para enganchar el balón de manera acrobática y batir a Tomasz Szczęsny por segunda vez en el encuentro.

Además, hay que destacar el gran duelo que tuvieron Renan Lodi y Douglas Costa. El lateral ofensivamente promete pero defensivamente sufrió, si bien es cierto, ante uno de los mejores jugadores a la hora de desbordar y regatear como es el extremo brasileño. De hecho, Costa fue el mejor del equipo italiano, por encima de un Cristiano Ronaldo que estuvo participativo pero sin fortuna y especialmente de un Gonzalo Higuaín que una vez más estuvo con falta de inspiración a la hora de definir.

El factor de la intensidad bajó en el segundo tiempo y en varios tramos, estuvo completamente descafeinado. Pero la Juventus, que siempre compite y que se veía por detrás en el marcador, buscó el empate. Lo pudo encontrar si no llega a ser por los palos. Primero con Douglas Costa y posteriormente, con Adrien Rabiot, que literalmente, reventó el poste izquierdo de la portería defendida por Oblak.

En la tanda de cambios, entró Gianluigi Buffon. El portero de 41 años se llevó una gran ovación por parte de los aficionados que llenaron el Friends Arena de Estocolmo. Debido a las excesivas sustituciones, el partido se convirtió por algunos instantes en un correcalles. Por parte de los italianos, Paulo Dybala, que no se sabe si seguirá vistiendo la camiseta del equipo dominador del fútbol italiano, tuvo varias acciones en las que pudo igualar la contienda. En el otro lado, hay un chaval que en los pocos minutos que ha disputado en esta pretemporada, ha dejado un buen sabor de boca. Es Rodrigo Riquelme. Fue el jugador más activo e incluso estuvo a punto de batir a Buffon con un lanzamiento soberbio desde fuera del área que se fue rozando la escuadra derecha de la portería defendida por el veterano guardameta.

Con este triunfo, el Atlético cierra una fantástica participación en la International Champions Cup logrando el segundo puesto con ocho puntos, uno menos que el Benfica, campeón de esta edición.