Se abre juicio oral a Luis Rubiales por su beso a Jenni Hermoso

El magistrado del 'caso Rubiales' ha dado un plazo de 24 horas a Rubiales para consignar una fianza de 65.000 euros para hacer frente a las eventuales responsabilidades civiles a las que pudiera ser condenado por agresión sexual. La misma cantidad deberá consignar por un delito de coacciones, de forma conjunta y solidaria, con Vilda, Luque y Rivera. Contra esta resolución hecha pública este miércoles no cabe recurso. La Fiscalía solicita dos años y medio de cárcel para Rubiales, un año más que para el resto de los encausados, por un escándalo que dio la vuelta al mundo y que, ante la presión social, política y deportiva, obligó al entonces dirigente granadino a abandonar su cargo al frente de la FEF.

El juez De Jorge advierte a Rubiales y los otros tres imputados que en caso de que no presten las fianzas requeridas «se les embargarán bienes en cantidad suficiente para asegurar la suma señalada». «Se concede a los acusados el plazo común de 10 días para que presenten escrito de defensa frente a las acusaciones formuladas», añade el titular del Juzgado de Instrucción número 1 de la Audiencia Nacional.

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La Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional ya confirmó hace dos semanas que Rubiales, al igual que Vilda, Luque y Rivera, deberán sentarse en el banquillo por el famoso beso a Jenni Hermoso y las posteriores presiones a la futbolista y su entorno para que la jugadora madrileña asegurase que había sido consentido. El pasado 22 de abril la Audiencia Nacional rechazó los recursos de apelación que presentaron los cuatro imputados contra el auto del magistrado que propuso juzgarles.

Ya en en el mes de enero el juez De Jorge propuso juzgar a Rubiales al considerar que el beso que dio a Jenni Hermoso «no fue consentido» y que el entonces presidente de la FEF actuó «de forma unilateral y sorpresiva», además de destacar en su resolución que «las presiones a las que se sometió a la jugadora» provocaron en la futbolista «una situación de ansiedad e intenso estrés». También irán a juicio Vilda, Luque y Rivera después de que el magistrado haya estimado que «existió una acción concertada de los tres acusados», concertada con Rubiales, para intimidar a Jenni Hermoso e intentar lograr que la jugadora grabara un vídeo en el que manifestase que el beso no fue forzado, sino que tuvo el consentimiento de la campeona del mundo.