El polémico penalti a Sterling y los dos balones en el campo

Los siguientes segundos se vivieron en medio de la euforia de los aficionados y futbolistas ingleses y la frustración y cabreo de los daneses, que le pedían una y otra vez al colegiado que fuera a revisar la jugada alegando que ninguno de los defensores había tocado al futbolista inglés. Tras poco más de un minuto de protestas y dudas, mientras el colegiado escuchaba lo que le decían desde el VAR, mantuvo su decisión y confirmó el penalti. Kasper Schmeichel detuvo el lanzamiento a Harry Kane, pero en el rechace el delantero del Tottenham no perdonó para sacar el billete a la final para Inglaterra ante un Wembley enloquecido.

Tras varias repeticiones, la jugada ofrece dudas y no se puede apreciar de forma clara el contacto de Maehle a Sterling e incluso los propios medios ingleses reconocen que «no se debería haber pitado» el penalti porque hay un «muy pequeño contacto» en el momento que Sterling se va al suelo. Kasper Hjulmand, seleccionador de Dinamarca, fue más contundente: «El penalti no debería haberse pitado a favor de Inglaterra». Martin Braithwaite, delantero del Barcelona confesó que «no hay nadie a quien culpar por el penalti porque no hubo penalti» y fue más allá al señalar que «tenemos que tragarnos eso. No creo que haya sido del todo justo, pero tengo que tener cuidado con lo que digo».

Pero la jugada decisiva de la semifinal no sólo estuvo en si hubo contacto o no de Maehle a Sterling, porque cuando se estaba iniciando la jugada había dos balones en el campo y en la misma zona y el colegiado debería haber parado el juego. El futbolista inglés, en su conducción, pasa junto a un segundo balón que había en el césped y por su proximidad, el colegiado pudo entender que interfería en el juego y haber detenido la acción. No lo hizo y acabó pitando un penalti que ya es histórico.

Y ya en el lanzamiento de penalti, un aficionado apuntó a Kasper Schmeichel con un puntero láser que podría haber molestado al portero danés y que, de haberlo visto, podría haber retrasado el lanzamiento de la pena máxima. Durante el choque, el colegiado ya había advertido al cuarto colegiado de esta circunstancia y desde la megafonía de Wembley se recordó la prohibición del uso de este artefacto.

El penalti del Inglaterra-Dinamarca no es la primera polémica de Danny Makkelie este año. El colegiado neerlandés, de 38 años y policía de profesión, cometió un error de bulto en el partido entre Serbia y Portugal de la fase de clasificación para el Mundial de Catar. Makkelie no concedió gol un remate de Cristiano Ronaldo que sobrepasó claramente la línea de meta en el minuto 94 y que hubiera significado el triunfo de la selección de Fernando Santos.

La jugada, con 2-2 en el marcador, se produjo tras un remate de Cristiano Ronaldo que serbio Stefan Mitrovic despejó, aunque el balón ya estaba dentro de la portería. Danny Makkelie no concedió el gol a pesar del cabreo que futbolista portugués que incluso abandonó el campo antes de que el colegiado pitara el final del partido.

Su asistente de aquel partido, Mario Diks, se quedó sin Eurocopa y Makkelie pidió disculpas en el diario portugués 'A Bola' por el error: «Según la política de la FIFA, lo único que puedo decir es que me disculpé con el seleccionador nacional, el Sr. Fernando Santos, y con la selección portuguesa por lo sucedido. Como equipo de árbitros, siempre trabajamos duro para tomar buenas decisiones. Cuando somos el centro de la noticia de esta manera, no nos satisface en absoluto».