Investigación a Hungría por insultos racistas a Mbappé y Benzema

Según explica una fuente presente en el Puskas Arena de Budapest, durante el encuentro se escucharon sonidos de mono cuando el delantero Kylian Mbappé tocaba la pelota. El madridista Karim Benzema, que tiene raíces argelinas, también fue insultado.

Más de 55.000 espectadores, en su mayoría húngaros, estuvieron en el Puskas Arena. Budapest es la única ciudad anfitriona del torneo continental que permite un estadio lleno en medio de la pandemia de coronavirus. Hungría ha sido castigada en el pasado por las autoridades del fútbol por racismo de sus aficionados.

En la jornada final de los partidos del Grupo F, que se celebrará en dos días, Hungría se enfrentará a domicilio a Alemania. El Ayuntamiento de Múnich ha pedido que el Allianz Arena se ilumine con los colores del arcoíris para el partido.

De hecho, Manuel Neuer, meta germano, ha sido investigado por la UEFA ya que luce el brazalete arcoíris, en apoyo al colectivo gay. No obstante, a pesar de que el jugador del Bayern podía haber sido sancionado, la entidad que rige el fútbol en Europa lo ha descartado: «Considerando que promueve una buena causa, por ejemplo la diversidad, no habrá procesos disciplinarios».

El martes, el parlamento húngaro aprobó una ley que restringe los derechos de información de los jóvenes con respecto a la homosexualidad y la transexualidad. La ley se considera importante para el primer ministro conservador ultraderechista Viktor Orban.