Eric García, el central que cautivó a Luis Enrique desde niño

En aquel Cadete B era inevitable ver en Eric a un futuro Gerard Piqué. Era un central de envergadura, con gran toque de balón, velocidad, perfecta colocación y un poderoso juego aéreo tanto en defensa como en ataque. Eran habituales sus goles en la estrategia. Siempre con el brazalete de capitán, tenía mando y jerarquía. Nadie dudaba de que llegaría al primer equipo para triunfar. Y, sí, ha aterrizado en el Camp Nou, pero no de forma directa, sino tras un paso de cuatro temporadas por el Manchester City. Se fue con 16 años, en 2017, porque los allegados de Pep Guardiola le hicieron ver que pidiera al club inglés el fichaje de semejante talento. Hasta en eso puede parecerse a Piqué, que también regresó al Barça en 2008 tras una etapa similar en Mánchester, aunque en el United. Sin embargo, algunas cosas sí son diferentes.

El crecimiento físico de Eric no fue el esperado. Si Piqué se fue a los 194 centímetros, García se quedó en 183. No está mal, pero para un central once centímetros son un mundo. A cambio potenció su sentido táctico del juego, la lectura de las anticipaciones y una claridad envidiable para sacar el balón jugado desde atrás. En 2018, con 18 años, ya debutó en el primer equipo del City, donde ya se instaló en 2019, pero sin las apariciones deseadas en el once titular, motivo por el que atendió a la llamada del Barça para recuperarle gratis.

Luis Enrique sabe que su convocatoria iba a crear cierta controversia porque coincide la entrada de un jugador que no es titular en su club con el descarte de dos madridistas como el 'tocado' Sergio Ramos y Nacho, por decisión técnica. Pero Eric García no es nuevo en esto del fútbol. Ya lideró otros equipos de las categorías inferiores de la selección española y cuando ha jugado con la absoluta lo ha hecho realmente bien, con colocación, criterio y solvencia. Ya no es aquel niño que el asturiano reconoció junto a Ansu Fati es un Cadete B del Barça. Ahora es un joven con actitud, carácter y una madurez poco habitual en los de su edad.