Lo que debes saber de Italia, rival de España este jueves

Italia, campeona de la última Eurocopa de fútbol en Wembley.

Federico Chiesa

Con Juventus

en 2023-24

37 partidos

2512 minutos

10 goles

2 asistencias

Con Italia

en total

49 partidos

7 goles

5 asistencias

Federico Chiesa despuntó en la Fiorentina con apenas veinte años y se ganó el traspaso a la Juventus en 2020. Aquella primera campaña en Turín junto a la sensacional Eurocopa que realizó ese verano, colocaron a Chiesa como uno de los grandes talentos del panorama europeo. Sin embargo, las recurrentes lesiones durante los últimos tres años han cortado en seco su progresión. Esta temporada ha recuperado sensaciones y su final de campaña ha sido positivo, lo que invita a pensar en que puede volver a sorprender en esta Eurocopa. Una Italia falta de calidad en la delantera necesita más que nunca del talento de Federico Chiesa.

Más de dos décadas después de su debut en la Serie A (incluido una etapa de tres años en Rusia) Luciano Spalletti levantó en Nápoles el scudetto que tanto se le había resistido. El título supuso conseguir por fin el reconocimiento que merecía, a la altura de los mejores entrenadores del mundo. Su Nápoles era un equipo maravilloso, brillante en ataque y muy sólido en defensa y aunque para él supuso una decepción no continuar al frente de los partenopeos poco tiempo después llegó la gran oportunidad de su carrera: dirigir a la Azurra.

El 4-3-3 es la formación fetiche de Spalletti, que le ha acompañado durante toda su carrera, aunque también ha utilizado la línea de tres centrales durante su etapa en la selección. En cualquier caso, la idea es la misma. Sus equipos siempre son vistosos y valientes, y tratan de salir con el balón jugador y acumular muchos jugadores en torno al poseedor para actuar con velocidad ante las posibles pérdidas. Frente a dos selecciones con mucho talento en el centro del campo como España o Croacia, que trataran de arrebatarle el balón, Italia puede sufrir, porque necesita dominar los partidos a través de la posesión. Ya sin Bonucci y Chiellini, la azzurra no tiene tanto talento defensivo, y puede pasarlo mal si se ve obligada a defender muy replegada.

Solo tiene 21 años, pero Martin Baturina ya es la estrella del Dinamo de Zagreb. Aunque las comparaciones con Luka Modric no se hayan hecho esperar Baturina es un jugador diferente al genio de Zadar. No es tanto un medio centro creativo como un media punta de mucha calidad que le gusta jugar en tres cuartos a la espalda de los medio campistas rivales. En esa zona es un jugador decisivo, con capacidad para girar y desequilibrar. Este año le pudimos ver en la eliminatoria ante el Betis, en la que fue decisivo y dejó muestras de su enorme talento.

Cuando Spalletti respondió a Mourinho y su comentario sobre la falta de talento de la selección italiana, dejó un pequeño dardo al portugués. Tenemos futbolistas fuertes que están surgiendo como Riccardo Calafiori, que es un jugador top” dijo el de Certaldo. Calafiori es un canterano de la Roma, que abandonó el club ante la falta de confianza de Mourinho. Encontró su sitio en Bolonia y a las órdenes de Thiago Motta se ha convertido en un jugador fundamental. Mide 1,88, lo que le hace poderoso en el juego aéreo, pero no carece de velocidad. Zurdo, puede actuar como central o lateral, una polivalencia que le viene muy bien a su seleccionador.

Italia, campeona de la última Eurocopa de fútbol en Wembley.

Federico Chiesa

Con Juventus

en 2023-24

37 partidos

2512 minutos

10 goles

2 asistencias

Con Italia

en total

49 partidos

7 goles

5 asistencias

Federico Chiesa despuntó en la Fiorentina con apenas veinte años y se ganó el traspaso a la Juventus en 2020. Aquella primera campaña en Turín junto a la sensacional Eurocopa que realizó ese verano, colocaron a Chiesa como uno de los grandes talentos del panorama europeo.

Sin embargo, las recurrentes lesiones durante los últimos tres años han cortado en seco su progresión. Esta temporada ha recuperado sensaciones y su final de campaña ha sido positivo, lo que invita a pensar en que puede volver a sorprender en esta Eurocopa. Una Italia falta de calidad en la delantera necesita más que nunca del talento de Federico Chiesa.

Más de dos décadas después de su debut en la Serie A (incluido una etapa de tres años en Rusia) Luciano Spalletti levantó en Nápoles el scudetto que tanto se le había resistido. El título supuso conseguir por fin el reconocimiento que merecía, a la altura de los mejores entrenadores del mundo. Su Nápoles era un equipo maravilloso, brillante en ataque y muy sólido en defensa y aunque para él supuso una decepción no continuar al frente de los partenopeos poco tiempo después llegó la gran oportunidad de su carrera: dirigir a la Azurra.

El 4-3-3 es la formación fetiche de Spalletti, que le ha acompañado durante toda su carrera, aunque también ha utilizado la línea de tres centrales durante su etapa en la selección. En cualquier caso, la idea es la misma. Sus equipos siempre son vistosos y valientes, y tratan de salir con el balón jugador y acumular muchos jugadores en torno al poseedor para actuar con velocidad ante las posibles pérdidas. Frente a dos selecciones con mucho talento en el centro del campo como España o Croacia, que trataran de arrebatarle el balón, Italia puede sufrir, porque necesita dominar los partidos a través de la posesión. Ya sin Bonucci y Chiellini, la azzurra no tiene tanto talento defensivo, y puede pasarlo mal si se ve obligada a defender muy replegada.

Cuando Spalletti respondió a Mourinho y su comentario sobre la falta de talento de la selección italiana, dejó un pequeño dardo al portugués. Tenemos futbolistas fuertes que están surgiendo como Riccardo Calafiori, que es un jugador top” dijo el de Certaldo. Calafiori es un canterano de la Roma, que abandonó el club ante la falta de confianza de Mourinho. Encontró su sitio en Bolonia y a las órdenes de Thiago Motta se ha convertido en un jugador fundamental. Mide 1,88, lo que le hace poderoso en el juego aéreo, pero no carece de velocidad. Zurdo, puede actuar como central o lateral, una polivalencia que le viene muy bien a su seleccionador.

Federico Chiesa

Con Juventus en 2023-24

37 partidos

2512 minutos

10 goles

2 asistencias

Con Italia en total

49 partidos jugados

7 goles

5 asistencias

Federico Chiesa despuntó en la Fiorentina con apenas veinte años y se ganó el traspaso a la Juventus en 2020. Aquella primera campaña en Turín junto a la sensacional Eurocopa que realizó ese verano, colocaron a Chiesa como uno de los grandes talentos del panorama europeo. Sin embargo, las recurrentes lesiones durante los últimos tres años han cortado en seco su progresión. Esta temporada ha recuperado sensaciones y su final de campaña ha sido positivo, lo que invita a pensar en que puede volver a sorprender en esta Eurocopa. Una Italia falta de calidad en la delantera necesita más que nunca del talento de Federico Chiesa.

Más de dos décadas después de su debut en la Serie A (incluido una etapa de tres años en Rusia) Luciano Spalletti levantó en Nápoles el scudetto que tanto se le había resistido. El título supuso conseguir por fin el reconocimiento que merecía, a la altura de los mejores entrenadores del mundo. Su Nápoles era un equipo maravilloso, brillante en ataque y muy sólido en defensa y aunque para él supuso una decepción no continuar al frente de los partenopeos poco tiempo después llegó la gran oportunidad de su carrera: dirigir a la Azurra.

El 4-3-3 es la formación fetiche de Spalletti, que le ha acompañado durante toda su carrera, aunque también ha utilizado la línea de tres centrales durante su etapa en la selección. En cualquier caso, la idea es la misma. Sus equipos siempre son vistosos y valientes, y tratan de salir con el balón jugador y acumular muchos jugadores en torno al poseedor para actuar con velocidad ante las posibles pérdidas. Frente a dos selecciones con mucho talento en el centro del campo como España o Croacia, que trataran de arrebatarle el balón, Italia puede sufrir, porque necesita dominar los partidos a través de la posesión. Ya sin Bonucci y Chiellini, la azzurra no tiene tanto talento defensivo, y puede pasarlo mal si se ve obligada a defender muy replegada.

Cuando Spalletti respondió a Mourinho y su comentario sobre la falta de talento de la selección italiana, dejó un pequeño dardo al portugués. Tenemos futbolistas fuertes que están surgiendo como Riccardo Calafiori, que es un jugador top” dijo el de Certaldo. Calafiori es un canterano de la Roma, que abandonó el club ante la falta de confianza de Mourinho. Encontró su sitio en Bolonia y a las órdenes de Thiago Motta se ha convertido en un jugador fundamental. Mide 1,88, lo que le hace poderoso en el juego aéreo, pero no carece de velocidad. Zurdo, puede actuar como central o lateral, una polivalencia que le viene muy bien a su seleccionador.

Federico Chiesa

Con Juventus en 2023-24

37 partidos

2512 minutos

10 goles

2 asistencias

Con Italia en total

49 partidos jugados

7 goles

5 asistencias

Federico Chiesa despuntó en la Fiorentina con apenas veinte años y se ganó el traspaso a la Juventus en 2020. Aquella primera campaña en Turín junto a la sensacional Eurocopa que realizó ese verano, colocaron a Chiesa como uno de los grandes talentos del panorama europeo. Sin embargo, las recurrentes lesiones durante los últimos tres años han cortado en seco su progresión. Esta temporada ha recuperado sensaciones y su final de campaña ha sido positivo, lo que invita a pensar en que puede volver a sorprender en esta Eurocopa. Una Italia falta de calidad en la delantera necesita más que nunca del talento de Federico Chiesa.

Más de dos décadas después de su debut en la Serie A (incluido una etapa de tres años en Rusia) Luciano Spalletti levantó en Nápoles el scudetto que tanto se le había resistido. El título supuso conseguir por fin el reconocimiento que merecía, a la altura de los mejores entrenadores del mundo. Su Nápoles era un equipo maravilloso, brillante en ataque y muy sólido en defensa y aunque para él supuso una decepción no continuar al frente de los partenopeos poco tiempo después llegó la gran oportunidad de su carrera: dirigir a la Azurra.

El 4-3-3 es la formación fetiche de Spalletti, que le ha acompañado durante toda su carrera, aunque también ha utilizado la línea de tres centrales durante su etapa en la selección. En cualquier caso, la idea es la misma. Sus equipos siempre son vistosos y valientes, y tratan de salir con el balón jugador y acumular muchos jugadores en torno al poseedor para actuar con velocidad ante las posibles pérdidas. Frente a dos selecciones con mucho talento en el centro del campo como España o Croacia, que trataran de arrebatarle el balón, Italia puede sufrir, porque necesita dominar los partidos a través de la posesión. Ya sin Bonucci y Chiellini, la azzurra no tiene tanto talento defensivo, y puede pasarlo mal si se ve obligada a defender muy replegada.

Cuando Spalletti respondió a Mourinho y su comentario sobre la falta de talento de la selección italiana, dejó un pequeño dardo al portugués. Tenemos futbolistas fuertes que están surgiendo como Riccardo Calafiori, que es un jugador top” dijo el de Certaldo. Calafiori es un canterano de la Roma, que abandonó el club ante la falta de confianza de Mourinho. Encontró su sitio en Bolonia y a las órdenes de Thiago Motta se ha convertido en un jugador fundamental. Mide 1,88, lo que le hace poderoso en el juego aéreo, pero no carece de velocidad. Zurdo, puede actuar como central o lateral, una polivalencia que le viene muy bien a su seleccionador.