El Tizona Universidad de Burgos muestra su condición de líder en Talavera

El encuentro comenzó con dos equipos muy nerviosos sobre el parqué talaverano, con numeras imprecisiones y dudas que impedían el desarrollo normal del juego. Entre los errores, fue el Tizona el equipo que comenzó a sacar provecho de la situación.

Después del triple inaugural del David Gómez y la canasta de Peter Stümer, Álvaro Martínez anotaba la primera canasta para los locales, devolviendo Dídac Cuevas a los tres minutos de juego la diferencia de cinco puntos para los burgaleses.

La imprecisión y la acumulación de faltas en el Talavera, hizo que los de Ocampo alcanzaran los diez puntos de renta con los tiros libres transformados por Peter Stúmer y la penetración a canasta de Sergio Val que colocaban el 2-12 en el marcador. Thomas y Andrejevic recuperaron terreno para los manchegos en un igualado final de cuarto que acabaría con 9-17 en el marcador y el debut de Fernando Andrés con el primer equipo.

El triple inicial de Silverstorm incomodó a los burgaleses que fallaban una y otra vez mientras el Talavera aprovechaba para igualar la contienda en menos de un minuto y medio de juego con ocho puntos de Corey Silverstorm. Ocampo paraba el partido en busca de un revulsivo pero el jugador talaverano se encontraba enrachado y con cinco puntos más colocaba la ventaja máxima del partido para los locales (22-17) con un parcial personal de 13-0.

Jairo Manzano Cantero Departamento de Comunicación del Club Baloncesto Tizona Ocampo volvía mover banquillo en busca de estabilidad, pero la precipitación beneficiaba a un Talavera que supo tutear al líder durante muchas fases del partido y es que los azulones abusaron del tiro exterior sin éxito, acabando el partido con tan solo un 17% de acierto.

Sin fortuna en el ataque, la defensa y el rebote debía ser la baza para luchar por la victoria final, consiguiendo recuperar de este modo la confianza el equipo de Ocampo. Seoane conseguía anotar desde el triple con 3:48 para el final del cuarto y daba la vuelta al marcador (23-25) dejando un atisbo de esperanza a un Tizona muy desdibujado.

El Talavera se rehacía y con los burgaleses en bonus, los tiros libres y las canastas de Onuetu y Luis García mantenían por delante en el marcador al equipo local. Dídac Cuevas buscaba echarse el equipo a la espalda una y otra vez, pero el base catalán no se encontraba enchufado. Sin embargo, tanto ir el cántaro a la fuente, dos triples, en dos jugadas consecutivas, daba de nuevo la vuelta al electrónico y obligando nuevamente a parar el partido a Ricardo Úriz (30-33) con menos de un minuto para el descanso.

La pizarra del técnico talaverano acertó con Silverstorm que, de nuevo con cinco puntos, sellaba un gran segundo cuarto del jugador con 18 puntos anotados y de un Talavera que firmaba un parcial de 26-16, llegando al intermedio con el partido por decidir (35-33).

El paso por vestuario recondujo al Tizona. Ocampo reconfiguraba al equipo que volvía a carburar y con los puntos de Rodrigo Seoane, Dídac Cuevas y Garmine Kande obligaban una vez más a parar el partido a Úriz (35-39) a los dos minutos de la reanudación.

El exjugador del Tizona volvía a acertar con la pizarra y con Thomas y Silverstorm volvían a dar la vuelta al marcador y obligando de nuevo a Diego Ocampo a pedir tiempo muerto en busca de reconducir la situación con 5:27 para el final del cuarto (46-41).

El Talavera se veía superior ante un Tizona impreciso y fallón. El tiro libre tomaba el relevo con los dos equipos en bonus y los nervios y la tensión hacían gala en los jugadores. Pese a los tiros adicionales errados, los de Ocampo conseguían reducir la renta hasta los dos puntos y llegar al último cuarto con igualdad en el marcador (51-49).

Dídac Cuevas comenzó el último cuarto con una jugada rápida que transformaba a la perfección para empatar el partido, pero la réplica del Talavera fue contundente. Los triples de Álvaro Martínez y Josep Peris colocaban una nueva ventaja máxima para los locales (57-51) en la reanudación del partido, complicando de nuevo el encuentro para los pupilos de

Diego Ocampo que comenzaban a acusar la falta de rotación. Entonces, después de todo lo errado, apareció de nuevo Dídac Cuevas. El base catalán anotaba cuatro puntos consecutivos para reducir distancias y poco después, otro triple de Rodrigo Seoane apretaba de nuevo el marcador con un triple imposible (59-58), parando Úriz el partido en busca de una nueva tecla para su equipo.

Pero en esta ocasión, Cuevas ya había despertado de su letargo y con un 2+1 volvía a colocar por delante en el marcador a los burgaleses (60-61) con 4:35 para el final. Jairo Manzano Cantero. Se avecinaba un final de infarto en el Primero de Mayo ninguno de los dos equipos defraudó en el espectáculo. Thomas empataba de nuevo el encuentro a falta de tres minutos desde la línea de 6,75m. La tensión era máxima y la fuerte defensa de ambos conjuntos, sumado al esfuerzo físico desatado, hizo que los errores volviesen a la pista.

Archer y Silverstorm desde el tiro libre colocaban el 66-63 en el marcador a falta de 1:21 para el final del partido. Seoane, en segunda instancia conseguía anotar para apretar de nuevo el marcador (66-65), pero la canasta de Thomas a falta de 34 segundos para el final obligaba a Diego Ocampo a parar el partido en busca de lo que parecía un imposible.

Cuevas buscó el triple sin éxito, dejando la bola de partido para un Talavera que falló el ataque por medio de Álvaro Martínez, dejando una nueva oportunidad al líder. Sin miedo, el burgalés Totte Alonso buscó la penetración a canasta, forzando la falta de Álvaro Martínez y consiguiendo introducir el balón en la cesta. El alero no falló y empataba el partido con tan solo ocho segundos para el final.

Richi Úriz volvía a parar el partido en busca de una match-ball, sin embargo, una gran defensa de los azulones forzaban la prórroga. Una vez más, Silverstorm anotaba desde el exterior para la desesperación de Ocampo (71-68). Cuevas mantenía la pugna por el partido y Thiam empataba desde el tiro libre a falta de 3:30 para el final del tiempo extra (71-71).

La pesadilla de Corey Silverstorm y sus triples continuaba persiguiendo al líder y de nuevo el Talavera rompía el partido con un parcial de 5-0 que culminaba Álvaro Martínez desde el tiro libre. Con tan solo dos minutos por delante y un complicado 78-73 en el marcador, el Talavera saboreaba la victoria. Pero otra vez Dídac Cuevas aparecía para revolucionar el partido.

Un triple del catalán y una canasta posterior al tiro errado por Silverstorm empataban el partido de nuevo a falta de cincuenta segundos para el final (78-78). Richi Úriz volvía a parar el partido. Toda la presión recaía entonces en el equipo local. Ocampo movía banquillo e introducía a Totte y Garmine en busca de la canasta final. Alfonso Meana fallaba el triple y a la contra Garmine Kande machacaba el aro para colocar el 78-80 en el marcador.

El Talavera buscaba a la desesperaba una última canasta que forzara un nuevo tiempo extra, pero la gran defensa del Tizona forzó el tiro triple de Silverstorm que en esta ocasión no entró, perdiendo Meana el balón, forzando la explosión de emoción de un Tizona que supo sobreponerse a los inconvenientes y tras luchar contra viento y marea suma el undécimo triunfo consecutivo. Luchada y trabajada victoria para un Tizona que recibirá el próximo sábado en El Plantío al Real Canoe a partir de las 19:00 horas.