Electrónica

¿Pasas muchas horas frente a la pantalla? Cuida de tus muñecas con este teclado ergonómico

Cuando se trata de pasar muchas horas frente al ordenador, ya sea por trabajo, por ocio, o por ambas cosas como es mi caso, es indispensable cuidar la ergonomía general: el monitor debe estar a una altura adecuada, la silla debe favorecer una posición correcta y el escritorio estar también a una buena altura.

Sin embargo, aunque todos esos son elementos muy importantes, no todo acaba ahí: quedan elementos como el teclado y el ratón que también juegan un papel vital a la hora de cuidar nuestro cuerpo, pues al fin y al cabo se trata de la parte del ordenador con la que estamos en contacto.

Si eres joven o no usas el teclado durante más que unas pocas horas al día, quizás aún no sientas molestias al teclear, tanto si se trata de ofimática, trabajo de otro tipo o simple gaming.

Sin embargo, no por ello hay que bajar la guardia: es un hecho que los teclados convencionales obligan a una posición forzada de las manos, que puede provocar lesiones y molestias tanto a corto como a largo plazo. No esperes a que el problema aparezca porque, como siempre, prevenir es mejor que curar.

Teclear con las manos en inclinación tanto vertical como horizontal, con las muñecas apoyadas en la almohadilla, relaja en gran medida esta tensión, lo que repercute también en hombros y cuello más ligeros, previniendo así agarrotamientos que pueden desembocar en dolores de cabeza.

En definitiva, un teclado ergonómico te ayuda a mantener una postura lo más natural y correcta posible, algo vital cuando se pasan muchas horas frente a la pantalla.

Cuando hablamos de teclados y ratones, Logitech sigue siendo una marca referente incluso en un mercado tan competitivo como el actual. Es cierto que sus productos no son los más baratos, pero siempre ofrecen una gran calidad en sus materiales y dispositivos, y este teclado ergonómico no es una excepción.

El K860 se distingue a simple vista de un teclado normal por dos características. Primero, porque las teclas están dispuestas en dos grandes divisiones, que corresponden a cada mano y con una disposición inclinada. Además, el teclado ofrece una curvatura vertical, alzándose en ese punto intermedio en que las dos partes de las teclas se separan en una suerte de montículo, que baja gradualmente.

Esto hace que pueda costar un poco acostumbrarse al principio, ya que todos estamos hechos a una disposición tradicional con las teclas más cerca unas de otras y sin separar entre sí, pero en cuestión de unos días/semanas la memoria muscular hace su trabajo y uno se acostumbra sin mayores problemas, como cuando cambiamos de teclado de forma normal.

Además, el K860 cuenta con una almohadilla reposamanos que sirve para reposar las muñecas al teclear, de forma que el brazo no quede en suspensión ni se apoye en el borde del escritorio, donde puede acabar molestando.

También es posible ajustar la elevación de palmas a 0º, 4º o 7º, dependiendo de las alturas de tu silla y escritorio.

Por supuesto, el teclado ofrece todos los estándares de calidad de la gama alta de Logitech, con un tacto agradable y materiales duraderos. El inalámbrico funciona perfectamente y sin latencia apreciable incluso en gaming competitivo, aunque si eres realmente hardcore en este aspecto quizás prefieras teclados más orientados al pro gaming.

Por otro lado, la alimentación usa 2 pilas AAA. Aquí vale la pena usar dos buenas pilas alcalinas y olvidarse, pues la batería dura unos 2 años, así que no será un problema.

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