Cristina Castaño
Cristina Castaño
J. Moreno
Martes, 23 de mayo 2023, 00:33
De actuar en un escenario a enseñar a otros a que lo hagan. La actriz Cristina Castaño (Villalba, Lugo, 44 años) es una de las mentoras de 'A este paso (no) estrenamos', el programa de entretenimiento y divulgación cultural de La 2 en el que ... treinta famosos con potencial para actuar se enfrentan a una experiencia teatral donde deberán hacer suyos textos de los grandes clásicos del teatro español. En la entrega de este miércoles, que emite la segunda cadena de TVE a las 23:00 horas, la exgimnasta Lourdes Mohedano, el exjugador de waterpolo Pedro García Aguado y el chef Gonzalo D'Ambrosio interpretan 'La venganza de Don Mendo'.
Publicidad
-¿Qué ha descubierto como mentora de los famosos aprendices de este programa?
-Ha sido una sorpresa, porque tienes que ejercer muchos papeles dentro del programa: tanto profesora y compañera como directora, y luego interpretar a diez personajes diferentes, aprenderte diez obras y poder explicarlas. Hemos trabajado, por ejemplo, en 'La vida es sueño', que tiene un trasfondo filosófico importante. Ha sido todo un reto y una labor muy bonita para mí. Se te llena el alma cuando trabajas con grandes autores clásicos porque, pese a que son obras que se han escrito hace siglos, son vigentes y se siguen representando. Ha sido una gran riqueza en ese sentido.
-¿Qué le decían los famosos ante sus órdenes?
-Muchos invitados planteaban: «Si nos equivocamos, volvemos a empezar, ¿no?». Pero se trata de vivir la experiencia teatral. Si te quedas en blanco, vas a salir y no pasa nada, porque en el teatro eso sucede y mientras el público no lo sepa, va todo bien. El problema es quedarte parado sin resolver. Si eso pasa, la vida te pasa por delante. Vamos a ver los secretos que suceden entre bambalinas y que el público va a poder conocer gracias a este programa.
-¿Ha perdido la paciencia con los alumnos?
-La paciencia no la he perdido como tal. Me he puesto firme cuando ha tocado, no desde ningún mal lugar, porque eso no corresponde nunca, ni en la vida ni en el teatro. Con Adriana Abenia, por ejemplo, que es una persona muy risueña y alegre, había un punto de pedirle seriedad porque había que montar la escena y no llegábamos. También he tenido que ser muy firme con muchos para que se aprendan el texto. Con Eduardo Navarrete había que tirar de paciencia, pero también entender el lugar en el que está el otro. Él no es actor, sin embargo, tiene mucha soltura y salero en el escenario frente al público y la cámara. Agradecía su disposición. Otros invitados han venido más resabiados. Piensan que es muy fácil, pero luego no es tan sencillo.
-¿Ha visto reflejada sus primeras veces en el teatro con estos famosos que nunca habían pisado un escenario?
-No he tenido esa sensación, porque sé que en algún punto ellos vienen a vivir una experiencia teatral, pero no van a comenzar una carrera profesional. Pocos invitados he visto que realmente tengan una inquietud o interés en dedicarse a esto.
Publicidad
-¿Estar en La 2 hace que se relaje más con la audiencia?
-Es un gustazo. Hay una relajación con las audiencias. Por supuesto que quieres que llegue al mayor número de espectadores posible, eso también es nuestro trabajo. Se agradece que en La 2 no haya este requerimiento de audiencia y que puedas trabajar cómoda en ese sentido, con los valores que pretende una cadena pública. Mi trabajo no ha sido entretener al público en casa, sino que entiendan 'Luces de bohemía'. Y esta ha sido una de las pocas veces en las que yo presento un proyecto del que tengo mucho orgullo al cien por cien. Ha sido algo bonito de hacer porque no ha habido una exigencia de 'share'.
-¿Cómo ve la situación del teatro en España?
-El teatro parece que siempre está en crisis, pero es lo único que sobrevive. Y más en las épocas de crisis. No va a morir nunca. Ahora, creo que por parte del Gobierno tiene que haber un apoyo por la cultura de su país. No somos un ejemplo en ese sentido. En el teatro somos unos supervivientes. Es necesario, porque el teatro siempre va a estar en las calles, va a tener a gente que quiera contar sus historias y va a tener un público que necesita escucharlas y verse reflejado. En este programa, por ejemplo, vamos a mostrar obras del siglo XVI que nos siguen enseñando. Y eso es importante que lo vean los jóvenes. Me han escrito profesores para decirme que lo pondrían en las escuelas.
Disfruta de acceso ilimitado y ventajas exclusivas
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.