Seis ilustradores reviven a los personajes de Delibes

Los personajes de las novelas de Miguel Delibes han dejado a todos sus lectores marcados para siempre. Más allá de aquellos a los que el cine o el teatro les pusieron cara, cada uno de los que hayan posado sus ojos sobre 'Cinco horas con Mario', 'El hereje' o 'El camino' habrá formulado en su mente la fisonomía de los protagonistas de las obras del autor vallisoletano.

Tras estas líneas seis ilustradores recrean a Daniel el Mochuelo, Lorenzo, Pacífico Pérez, Azarías, Menchu y Minervina Capa debajo de una semblanza de los personajes escrita por Ramón García.

Muchacho de pueblo, de 10-11 años, que mira las cosas que le rodean con tanta atención y fijeza, que parece que lo hace con los redondos ojos de un mochuelo. Siempre acompañado de sus amigos Roque el Moñigo y Germán el Tiñoso. Los motes, en los pueblos, ya se sabe...

La autora: María Simavilla (Salamanca, 1983). Pasé nueve años en la Escuela de Nobles y Bellas Artes de San Eloy (Salamanca) hasta que cumplí los dieciocho e ingresé en la facultad de Bellas Artes de la Universidad de Salamanca, donde me licencié en la especialidad de dibujo.

Redescubrí el maravilloso mundo de la ilustración durante esta etapa, cuando en cuarto curso tuve la suerte de pasar por el filtro del gran Miguel Ángel Pacheco en la asignatura de Ilustración. Otra experiencia que me hizo crecer en este campo fue el año que pasé como alumna del programa Erasmus en la Academia de Bellas Artes de Venecia, donde tomé contacto con el mundo del grabado.

En sus estudios de doctorado en Historia del Arte-Bellas Artes por la Universidad de Salamanca ha analizado la situación del arte en el momento actual.

Uno de los personajes más simpáticos y redondos salidos de la pluma de Delibes. Fanfarrón, exagerado, pero amigo de sus amigos y enamorado hasta las cachas de su novia Anita. El propio Delibes lo retrata así en el prólogo de su Obra Completa: «Lorenzo es un ejemplar español incontaminado; un producto del sol y del viento, bravucón y refrenado, largo de lengua y más corto en hechos, vehemente y soñador, perezoso y criticón, pero, al propio tiempo, limpio para amar, generoso en las entregas, noble en los principios y leal en la amistad (...)»

El autor: Jesús Aguado (Valladolid, 1976) decidió un día convertir su hobby en un oficio, y el oficio en su pasión. Se licencia en Bellas Artes y comienza a trabajar para diferentes editoriales. Han pasado varios años ya y la constante búsqueda de nuevos estilos y nuevas maneras de expresión mediante el dibujo es lo que más le incita a continuar.

Aficionado al cómic, ha sido premiado en varios concursos (Elgoibar, Tomelloso, Portugalete, Salamanca). Sus ilustraciones son reconocidas por muchos escolares al acompañar un buen número de libros de texto.

El nombre le cuadra a las mil maravillas con su propio nombre y personalidad. Es un muchacho, un ser ingenuo, inocente y de una desmesurada hipersensibilidad que, para colmo, no rima para nada con su entorno familiar agresivo y belicoso. Si el dibujante pudo ver a Pepe Sacristán encarnando a Pacífico en el teatro, tuvo medio trabajo hecho.

El autor: Jacobo Muñiz (Ferrol, 1973). Alguien dijo que la medida en la que disfrutamos de nuestro trabajo viene determinada por el grado de semejanza que éste tenga con aquellos juegos de la infancia que más nos divertían.

De niño, Jacobo pasaba las horas dibujando, haciendo cuentos sobre folios sueltos que luego grapaba toscamente (nunca manejó bien las grapadoras). Después llegó una etapa de oscuridad y turbulencias en la que dejó de escucharse a sí mismo. Hasta que, al toparse con la frase del principio, junto a otros ingredientes de la vida, dio como resultado su vuelta al dibujo.

Hoy disfruta tanto como cuando era pequeño. Su objetivo es reencontrarse con aquella espontaneidad infantil que guía la mente de cualquier niño.

Otro tanto digo del Azarías, encarnado por el actor Paco Rabal, en la película homónima de Mario Camus. La milana, su pájaro, es imprescindible en la recreación dibujada. Digo.

El autor: Felipe López Salán (Valladolid, 1948) inició su carrera en la editorial Miñón en la que trabajó durante trece años. Desde entonces ha enfocado su trabajo en los libros para niños, colaborando con las más importantes editoriales españolas. También ha colaborado con el periódico El Norte de Castilla y ha realizado trabajos para instituciones como la Junta de Castilla y León y Amnistía Internacional.

Lola Herrera lo bordó en los escenarios. Una mujer viuda que vela -«cinco horas»- el cadáver de su esposo muerto repentinamente, y se desahoga rememorando su vida matrimonial, su vida en común.

La autora: Sandra Rilova (Burgos, 1988). Estudió Bellas Artes en la facultad del País Vasco, especializándose en la rama de pintura. Poco después, y siguiendo su pasión por el cine, se mudó a Barcelona donde cursó estudios de Dirección Artística Cinematográfica. Después de trabajar en varios proyectos, se dio cuenta que aquello no era lo suyo y, en ese momento de dudas, aparece la ilustración en su vida.

Ahora trabaja en casa, junto a su familia, desde donde observa el mundo y trabaja como si fuese una directora de cine. Escoge los escenarios, hace el casting de personajes y crea mundos.

Para Sandra, la ilustración es un medio que le permite contar historias, proyectar su propia visión sobre lo que está ilustrando. En definitiva, construir imágenes desde una mirada personal.

Durante estos años su trabajo ha sido seleccionado en el VI Catálogo Iberoamericano de Ilustración, en Ilustrarte 2016, Latin American Ilustración 5 y en el World Illustration Awards 2017. Su álbum 'I am King' ha sido finalista en el Silent Book Contest 2018 de la China Shanghai International Children's Book Fair - CCBF.

No es el personaje protagonista de la novela, lo es Cipriano Salcedo -«el hereje»- pero es un personaje femenino sin igual en la narrativa delibeana. El dibujante de turno, con que lea el magistral final de la novela, la declaración de Minervina ante el tribunal de la Inquisición -en la que llama «mi niño» cinco veces a Cipriano Salcedo, recién quemado en la hoguera inquisitorial- con que el dibujante, digo, lea esta declaración, va más que servido.

La autora: Cinta Arribas (Valladolid, 1983). Estudió Bellas Artes en Salamanca entre 2003 y 2008, y completó su formación en Kassel (Alemania). Entre sus proyectos editoriales está 'Bababum', una serie de cuadernos de actividades para niños, o 'Hijos de Fruta', un fanzine coloreable.

Colabora, entre otros medios, con Agencia Sinc, Magazine Fashion & Arts (La Vanguardia), Gràffica, El Asombrario & Co. (eldiario.es), Experience (Airline Passenger Experience Association), la revista Eco y El Español. También ha trabajado en campañas publicitarias como la del festival Curtocircuito, carteles para Cidade da Cultura de Galicia e Injuve, materiales para grupos de música como Novedades Carminha, etiquetas para la compañía cervecera Collective Arts Brewing...

Recientemente ha publicado los libros 'La isla de los niños encontrados' (Mueve Tu Lengua, 2018), 'I hate everyone' (POW Kids, 2018), 'Pequeña & Grande Gloria Fuertes' (Alba Editorial, 2017) y 'Coco, ¿dónde estás?' (Sallybooks, 2016).

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