J. D. Barker culmina su trilogía del cuarto mono con 'La sexta trampa'

Del monasterio japonés de Nikko, donde los monos ni ven, ni escuchan, ni hablan, a las calles de la ciudad del viento, las tramas de Barker beben de películas como 'Seven' o 'El silencio de los corderos', donde la intriga se combina con esporádicas dosis de violencia que generan en el lector una sensación de fatal atracción.

«En muchas partes del mundo, el sistema de justicia es poco más que una ilusión y, tristemente, el dinero puede comprar que alguien se libre de problemas. Pero ricos y pobres se vuelven iguales delante de la punta de un cuchillo afilado», decía Barker cuando presentó 'El cuarto mono', un 'best-seller' mundial que abrió esta trilogía y que le permitió hacerse un nombre como autor, de manera que fue uno de los elegidos para escribir a cuatro manos la precuela de 'Drácula', la inmortal obra de Bran Stoker, que en España se tituló 'El origen' y que publicó la editorial Planeta.

En 'La sexta trampa', J. D. Barker mantiene la original estructura de las dos anteriores novelas. Las voces de los protagonistas se alternan y ofrecen una visión poliédrica de la historia, en la que aparecen policías corruptos y el departamento se llena de intrigas. Además, aunque el libro está escrito mucho antes del coronavirus, el autor sitúa parte del argumento en un hospital que está cerrado por cuarentena, después de que varios protagonistas quedaran expuestos a un tipo de SARS.