Todos los caminos llevan a San Sebastián Gastronomika

El aroma de los platos que los chefs cocinaban al momento y repartían entre los asistentes en el auditorio del Kursaal es una de las señas de identidad del congreso que no podrá repetirse en esta atípica edición de 2020, sin público presencial. La actualidad sanitaria impone eventos online y distancias físicas pero, haciendo de la necesidad virtud, eso permitirá acortar distancias virtuales y llegar a las cocinas de profesionales que hasta ahora no podían soñar con costearse el viaje a la capital guipuzcoana para aprender de los grandes.

«El sector se encuentra en una auténtica encrucijada, frente a cada persona y empresa se abren muchas incógnitas, pero también muchos caminos», sostiene Benjamín Lana, presidente de Gastronomía de Vocento. Por eso la organización del decano de los congresos culinarios ha tratado de «estar a la altura con imaginación, nuevos recursos tecnológicos y alternativas diversas para reunir a nuestra gran familia de la cocina y apoyarla con toda nuestra fuerza e ilusión», afirma.

Eso se ha traducido en un formato innovador que lejos de limitarse a una mera sucesión de conferencias en pantalla, hace gala de una gran creatividad a la hora de adaptarse a la nueva realidad. Buena parte de las ponencias o actividades trasladarán sus retransmisiones en directo a algunos de los restaurantes donostiarras más universales. Se mantendrán los populares concursos culinarios, como el III Campeonato de Ensaladilla Rusa que patrocina San Miguel, o el X Concurso Nacional de Parrilla. Y se ha conseguido dar forma a una feria virtual para las marcas del ramo que permitirá un contacto directo con los profesionales. El resultado es una experiencia que sigue siendo rica para los participantes y más influyente si cabe por cuanto será capaz de llegar a un público más amplio y diverso.

La diversidad será precisamente la tónica del congreso en lo tocante a lo estríctamente gastronómico. Bajo el título 'Caminos, bideak, pathways' revisará tendencias alternativas y realidades de la cocina internacional que no han gozado siempre de visibilidad en primera línea. Por un lado invita a participar a chefs que se salen de los cánones establecidos, que no necesariamente siguen el libro de instrucciones para conseguir estrellas y que apuestan por formatos más informales, precios moderados, productos de cercanía, manipulaciones respetuosas y una rigurosa temporada. A esos heterodoxos que no siempre se dejan ver en los congresos de cocina estará dedicada una de las jornadas.

También habrá espacio para una cocina orgullosa de sus raíces negras que se desarrolla en África, América o las Antillas. Una nueva ola culinaria que ha merecido la atención del New York Times y cuyos principales protagonistas pasarán por el auditorio virtual de San Sebastián Gastronomika. Les arropará ejerciendo de anfitriona la escuadra imbatible de cocineros vascos -Arzak, Subijana, Arbelaitz, Aduriz, Berasategui, Atxa, Alija y Arguiñano- y una nutrida selección de cocineros italianos, golpeados igualmente por la pandemia, a los que el congreso dedica este año un hermanamiento especial. «Gastronomika 2020 es nuestra muestra de amor al sector -resume su directora, Roser Torras-, un congreso igual de cercano pero más abierto que nunca».    

     

Hay muchos cambios en esta edición decisiva de San Sebastián Gastronomika-Euskadi Basque Country pero la oportunidad de rendir homenaje a los grandes del gremio se mantiene. En 2020 y casi por aclamación popular el Premio Homenaje recae en el asturiano afincado en Washington José Andrés, que ha organizado un ejercito internacional de cocineros para alimentar a los más desfavorecidos durante la pandemia. En el apartado de sala, el Gueridón de Oro va a parar a un hombre de la casa, Txomin Rekondo, responsable de una de las mejores bodegas del mundo en las faldas del monte Igeldo. Y el galardón 'Pau Albornà i Torras' recae esta vez en Ignacio Medina, por su contribución al periodismo gastronómico en América Latina en los últimos diez años.