La covid-19 trunca por segunda vez la Feria del Libro, que se traslada a las librerías

Hasta el último momento, la Asociación Provincial de Libreros de Burgos ha estado buscando una alternativa que permitiese organizar una Feria del Libro presencial. Los eventos online se han apropiado de la programación cultural durante los útimos meses, y seguirán siendo la mejor baza frente a la paralización a la que nos somete la pandemia. Pero con la Feria del Libro se quería recuperar la esencia de lo presencial, los encuentros con escritores, las firmas de libros.

«No se vive con la misma intensidad», reconoce Álvaro Manso, un encuentro en el que el lector puede interactuar de tú a tú con el escritor que una videoconferencia, por mucho que se pueda incluso dialogar con el protagonista. Y los lectores de Burgos lo estaban deseando. Querían volver a sentir las emociones que se viven en una Feria del Libro, que van mucho más allá de la mera compra de un ejemplar, que además tiene un importante descuento.

Pero no va a poder ser. Se van a tener que conformar con una feria del libro de pequeño formato, en las propias librerías. Del 20 al 29 de noviembre, 16 establecimientos de la ciudad (y dos de Aranda y Miranda) van a celebrar su particular feria, con descuentos del 5% en la venta de libros, una programación de animación a la lectura a través de la difusión diaria de un 'lema lector' y una recomendación, también diaria, a cargo de los propios libreros.

«Las restricciones son claras, no dejan alternativa», insiste Manso. Ni opción a celebrar el evento en cualquier otro tipo de instalación no municipal ni a organizar encuentros, firmas de libros o actividades presenciales. Todo ha quedado suprimido y, ante esta situación, la asociación ha descartado convertir la programación presencial en online, aunque Manso reconoce que todos los que estaban dispuestos a participar habrían aceptado hacerlo vía telemática.

Así que la Feria del Libro se convierte en un Día de las Liberías, como el celebrado el pasado 13 de noviembre, pero a lo grande. Nueve días especiales para los lectores, que van a poder celebrar su pasión por los libros y, además, adelantar las compras navideñas, reconoce Manso. «Las librerías siempre han sido un espacio completamente seguro», remarca, y ahora lo siguen siendo. Como cualquier otro establecimiento comercial.

Además del descuento del 5%, y para animar las compras, cada librería sorteará cinco bonos de 100 euros cada uno entre los clientes que compren libros durante la semana. «Es un incentivo», reconoce Manso, ya que no se puede celebrar la feria como a los libreros les hubiera gustado y, además, al no existir ese formato los descuentos aplicables no alcanzan el 10% habitual.

Las librerías que participan en la Feria del Libro son: Librería Hijos de Santiago Rodríguez, Amábardos, Librería del Espolón, Librería Luz y Vida, Librería Octavos, Librería Anticuaria Lyda, Música y Deportes, Viñetas, Librería Dina 4, Librería La Llave, La Silla Mágica, Librería Museo Evolución Humana, Librería Mar de Hojas, Librería Bosque de Letras, ÁVALON, Librería Margof, Librería Estudio (Miranda de Ebro) y Todo Libro (Aranda de Duero).