El 'Mata Mua' y la colección Thyssen se quedan en España

La cuenta atrás acababa el 31 de enero y en el meollo de la cuestión estaba el 'Mata Mua' de Paul Gauguin, que se halla en un búnker en Andorra, donde Carmen Thyssen tiene fijada la residencia, y que ahora deberá volver al museo. El acuerdo pone punto y seguido a este culebrón que duraba más de una década. Contempla el pago de 6,5 millones de euros anuales durante 15 años a Carmen Thyssen y valora las 429 piezas de su colección en 1.040 millones de euros.

Es la cifra que manejaba la aristócrata, frente a los 425 millones que barajó el ministerio. Todas las obras seguirán al lado de la excepcional colección del barón Thyssen, comprada en 1993 por el Estado español por 42.000 millones de pesetas (unos 252 millones de euros). Es una operación «que da estabilidad a la colección y al museo» se felicitan desde Cultura.

El acuerdo contemplaría la 'explotación' comercial del 'Mata Mua' y disposiciones «favorables» para el régimen de estancia en España de la aristócrata, que fijó su residencia en el Principado hace casi tres décadas. Una de las condiciones de Carmen Thyssen para permitir que la legendaria obra de Gauguin se quede en España es que se le reconozca un régimen especial de estancia y se le permita el alquiler en préstamo fuera de España, lo que le granjearía notables beneficios comerciales.

El bufete MA, que representa a la baronesa, negoció cómo computar los días que Thyssen pasa en España. Sus letrados recuerdan que «la ley contempla que la aportación cultural o humanitaria con administraciones españolas tenga algunas excepciones». Se lograría así que los días que la baronesa pase en España realizando actividades relacionadas con el museo no computen entre esos 183 días que la ley fija como plazo máximo que pueden pasar en España los residentes fiscales en Andorra.

El precio del alquiler del acuerdo final es más bajo del que Tita Cervera negoció en 2019 con José Guirao, antecesor de Rodríguez Uribes, y que ofreció siete millones durante 15 años, siempre que el mítico lienzo de Gauguin permaneciera en la colección, frente a los 8,3 que reclamaba la baronesa dejando fuera del acuerdo el 'Mata Mua' y otras dos obras.

La valiosa tela del pintor francés que la aristócrata sacó el museo en junio es la joya de su colección. Tita Cervera dijo que no pensaba venderlo, aunque podría haberlo hecho, ya que disponía de la licencia de exportación. Y en subasta obtendría, como poco, entre 80 y 100 millones de euros.

En la decimoquinta prórroga del acuerdo de cesión, en diciembre de 2019, la baronesa excluyó de la colección otras tres obras más: 'El puente de Charing Cross', de Monet; 'Caballos de carreras en un paisaje', de Degas, y 'El Martha McKeen en Wellfleet', de Hopper, los tres hoy fuera de España y que deberán regresar al palacio de Villahermosa.

La baronesa dijo que no preveía «subastarlos», pero amagó con hacerlo como ocurrió con 'La esclusa', de Constable', que subastó en 2012 por 28 millones para «obtener liquidez».