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Paula Velasco
Jueves, 17 de mayo 2018, 13:14
La Alianza UPA-COAG considera «un despropósito que siga amparándose la expansión incontrolada de la fauna salvaje antes que la actividad profesional de los ganaderos». Según han explicado en nota de prensa, la Junta admite que los ataques de lobos, en el primer trimestre del ... año 2018, se han disparado un 80 % respecto al mismo periodo del año pasado. En lo que va de año, «cerca de 2.000 ataques de lobos son los que se han registrado en las provincias de Ávila y Segovia».
Además de calificar la situación como de «escándalo», aseguran que los ganaderos sufren tanto el daño económico como el moral, dado por sentencias como «la conocida en las últimas horas sobre la paralización cautelar de la caza del lobo al norte del Duero durante esta temporada».
La Alianza UPA-COAG «considera justificada la caza de ejemplares al norte del Duero debido a los altísimos niveles poblacionales, distribución geográfica e índice de reproductividad de la especie». Para ellos «es incomprensible que no se presenten alegaciones suficientemente pormenorizadas y no genéricas por parte del Gobierno regional, tal y como recoge la última sentencia, para que se actúe de una vez por todas con la contundencia que la situación exige».
Igualmente, denuncia una vez más la «indefensión absoluta en la que se encuentran los ganaderos», los cuales, asegura, son «víctimas económicas de los lobos, además de víctimas morales a nivel judicial, político y social».
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