La Unión de Campesinos de Castilla y León insiste en la necesidad de llevar a cabo una especial vigilancia en la trazabilidad de los productos de Castilla y León, en concreto de los lechazos, para que el consumidor sea consciente de lo qué compra y no haya lugar a fraudes.
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Ante esta situación, la UCCL ha solicitado la constitución de una comisión conjunta de Agricultura y Consumo que analice cómo se están llevando a cabo los controles sobre el etiquetado de los lechazos, pues «seguimos detectando que, en muchos casos, no se recoge la procedencia del producto», señalan fuentes de la organización agraria.
El correcto etiquetado de los productos, en el que se recoge el origen del producto, implica un valor añadido para el ganadero ya que la calidad de los lechazos de Castilla y León es muy superior. Además esta medida puede ayudar a que se reduzca la crisis del sector ovino que en el último año ha perdido un 7% de ganaderos, según apunta la Unión de Campesinos de Castilla y León.
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