Tudanca sostiene que todos los barones del PSOE defienden la Constitución y De la Hoz lo acusa de «cobarde»

El PP quiso que se votara en la cámara regional la oposición a «cualquier acuerdo político de investidura, legislatura o gobierno» que vulnere tres principios: que España es una nación, que no hay conflicto político entre España y Cataluña, y que no se conforme ningún instrumento de negociación bilateral entre el Estado y Cataluña. Los tres puntos se votaron por separado y a todos ellos se opuso el grupo socialista y los dos procuradores de Podemos, aunque las votaciones salieron adelante gracias a la mayoría de PP y Ciudadanos.

El portavoz popular, Raúl de la Hoz, desafió a Tudanca a que dijera si estaba en el mismo bando de los barones socialistas más críticos a la negociación con ERC, como Emiliano García Page (Castilla-La Mancha) o Javier Lambán (Aragón), o con «el señor Puig, el señor Iceta o la señora Armengol», en referencia a los líderes socialistas de la comunidad Valenciana, Cataluña y Baleares, y proclives a la negociación en curso para facilitar la investidura de Sánchez.

Tudanca comenzó su intervención en el pleno leyendo el artículo 2 de la Constitución, donde se remarca la «indisoluble unidad de la Nación española», pero donde también se refleja «el derecho a la autonomía de nacionalidades y regiones». «Esta es la Constitución en la que cree todo el Partido Socialista, la misma que votamos a favor. Ustedes no la apoyaron», recordó a la bancada del PP.

Tudanca acusó a los populares de pasar del «autonomismo útil» que propugnaba Juan Vicente Herrera a un «nacionalismo inútil» y de ser incapaces de aceptar sus últimas derrotas electorales. Además, insistió en una idea que ya apuntó el pasado viernes en rueda de prensa: la del apoyo de los diputados populares de Castilla y León para evitar que la investidura de Pedro Sánchez dependa del sostén independentista. «Si a ustedes les importara de verdad nuestro país, si hubiera algo de verdad en esta iniciativa, solo quedaría una opción posible: que el señor Mañueco ordenara a los diputados de Castilla y León que votaran a favor del gobierno de Pedro Sánchez. Se acabaría la discusión. Pero se trata de acabar, si hace falta, con España para quedarse con el solar. Pediría lo mismo a Ciudadanos, pero es que no les quedan diputados en Castilla y León».

El secretario general del PSOE de Castilla y León acusó al PP de intentar «romper, dividir y doblegar» a los socialistas, «porque se creen que el poder es suyo». «Hemos sobrevivido a guerras, dictaduras y golpes de Estado. El PSOE lleva 140 años defendiendo España. Se lo diré claro: el señor García Page, el señor Lambán, el señor Iceta, la señora Mendía, la señora Armengol, la señora Díaz, el señor Barbón y yo defendemos el mismo socialismo y la misma España. La España de la igualdad, la feminista, la ecologista y la plural», desgranó Tudanca.

Raúl de la Hoz calificó al portavoz socialista como «un cobarde» por «no alzar la voz frente a aquellos que buscan legitimar la ruptura de la España constitucional». «El artículo 2 de la Constitución que usted mencionaba es incompatible con 'su' Declaración de Barcelona, con el Pacto de Pedralbes y esas 'ocho naciones que hay en España porque yo las he contado'», apuntó de la Hoz en referencia a las declaraciones del líder del PSC, Miquel Iceta.

De la Hoz recordó unas palabras de Pedro Sánchez de hace un mes en las que se preguntaba «donde quedaría España si la mitad del gobierno defendiera la Constitución y la otra mitad dijera que hay presos políticos y defendiera la autodeterminación en Cataluña». «Hoy se lo pregunto yo, señor Tudanca. ¿Dónde queda España? ¿Tiene alguna respuesta para los castellanos y leoneses?». Igualmente, De la Hoz subrayó que Sánchez, «a las 48 horas de las elecciones eligió la vía radical». «Nos habría gustado que se sentaran con nosotros. El señor Casado llamó al señor Sánchez para sentarnos y hablar de un pacto. Rompan con Podemos ahora y sentémonos a negociar porque no cabe pacto alguno con los filoterroristas ni con los separatistas. Es lo que usted mismo piensa, señor Tudanca, pero no tiene la gallardía de expresarlo».

El grupo de Ciudadanos defendió la «vía Arrimadas» para lograr «un gobierno de 222 escaños», según apuntó la procuradora Marta Sanz, que se mostró de acuerdo con la iniciativa del PP en las Cortes autonómicas, pero criticó que no aportase «una solución» para impulsar una vía alternativa.

El Grupo Mixto dividió su turno de intervenciones para dar cabida a las posturas de Vox, UPL y Podemos. «España es una nación. Jugar a aceptar más naciones que España es una puñalada por la espalda que todos los partidos deben condenar», consideró Jesús García-Conde, de Vox. «No me gusta que el Partido Socialista pacte con Esquerra, pero ustedes tienen la oportunidad de evitarlo. Los que no tenemos esa opción somos nosotros en la UPL», declaró el leonesista Luis Mariano Santos. «Hoy el PP vuelve a traer una iniciativa que no versa sobre Castilla y León y lo hace amparándose en la Constitución, después de mancillar nuestra Carta Magna. Habrá un gobierno en España que cumpla la Constitución, que se sustenta en la igualdad y que sea el antídoto contra el fascismo y la extrema derecha», finalizó Pablo Fernández, de Podemos.