Traspinedo clama por una explicación sobre la muerte de Esther López

Los vecinos, y así lo señalan la mayoría, acogen con «incredulidad» la tesis del atropello como causa de la muerte que baraja ahora la Guardia Civil. Pero lo cierto es que, aunque sin una confirmación oficial al respecto -el mutismo sobre la investigación es absoluto-, esta teoría del atropello está ahí. El cuerpo de la víctima presentaba lesiones internas (traumatismos) previas a su muerte, fue hallado en una cuneta al borde de la carretera que conduce al núcleo urbano y los forenses sitúan su fallecimiento en torno a la misma madrugada en la que desapareció aquel 13 de enero. Los investigadores, al menos de inicio, apuntaron que todo parecía indicar que el cuerpo había sido ocultado en otro lugar y tirado allí posteriormente. De ser así no tendría sentido la línea de investigación del atropello que los propios agentes evidenciaron con las pruebas y recreaciones sobre la calzada, en torno al lugar del hallazgo, que realizó el martes un equipo especializado de la Benemérita.

«No sabemos lo que le pudo ocurrir a Esther, pero aquí no vamos a olvidarla y vamos a estar siempre junto a su familia a la hora de reclamar, si es necesario, que se pongan todos los medios para resolver lo ocurrido», anticipa el regidor, quien reconoce el «dolor» que sienten los vecinos al pasar a diario por el punto (de paso obligado hacia la carretera de Soria), ahora marcado por la presencia de flores y mensajes en recuerdo de Esther López. «Siempre va a estar ahí y el dolor no se irá, pero tampoco dejaremos de pedir Justicia si se confirma que pudo ser un atropello o que hubo alguien implicado en su muerte», añade el regidor antes de reiterar que «todos aquí queremos saber lo que ha pasado por el bien de la familia y de todos los vecinos y para poner fin a tantas incertidumbres».

Javier Fernández, no obstante, apunta a que los vecinos siempre «tendremos un recuerdo positivo de Esther y siempre tendremos una sonrisa en su recuerdo. Y su «sonrisa infinita» fue precisamente lo que destacó una de sus primas en su emotiva carta de despedida, que ella misma leyó durante el funeral, celebrado el miércoles en la iglesia parroquial, y que la propia familia ha querido hoy compartir de forma íntegra.