«Es tradición que los quintos 'pidan las rosquillas'»

Las tradiciones que conservamos en Turégano nos llevan a tiempos remotos y un ejemplo de ello es la Feria de San Andrés, que está datada en la Edad Media y que hoy en día es una feria multisectorial que congrega a muchas personas en la localidad.

Además de las citas religiosas que suponen parte de nuestras costumbres, en Turégano se mantiene la tradición de que los quintos 'pidan las rosquillas'. Antiguamente estos jóvenes recorrían las casas donde les entregaban ese dulce, pero como los tiempos son otros, en la actualidad son ellos los que entregan los dulces a cambio de algún dinero. Esta petición tiene lugar el segundo día de Pascua. También son los quintos los que portan un paso en Semana Santa y en la procesión de la noche de velas, el Viernes Santos, desfilan con las antorchas.

La tradición gastronómica nos lleva a hablar del cordero asado y el bacalao ajo arriero, dos de los platos que eran típicos en todas las celebraciones y que continúan siendo muy tradicionales pues es un reclamo en ferias comer ese bacalao.

Las fiestas y sus celebraciones conllevan un proceso de adaptación continuo pues ya hace años que algunas se trasladaron porque coincidían con las labores del campo. Las fiestas tradicionales son, además, un buen momento para disfrutar del folklore y de los trajes que se conservan en las familias.

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