El consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, estimó este martes que el rescate de las autopistas españolas «no va a ser posible» desde un punto de vista financiero. Para Suárez-Quiñones, la opinión de la Junta como Gobierno «responsable ... y sensato» es que ese rescate «no es fácil» en una coyuntura económica como la actual porque supondrá unos montantes económicos que «creemos que no va a ser posible», aunque en el caso contrario «bienvenido sea», informa Ical.
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Suárez-Quiñones recordó que la Junta ya alcanzó un acuerdo con el Ministerio de Fomento para el desvío, de manera obligatoria, del tráfico de los vehículos pesados de cuatro o más ejes desde la N-I a la autopista de peaje, un texto que se está tramitando en el Ministerio. Desde la Junta se pidió al nuevo Ejecutivo que mantenga la tramitación porque el Gobierno autonómico mantiene su consignación presupuestaria para asumir ese coste. «Seguimos con la misma intención, y en el momento en el que tenga redactado el convenio, el trámite en Castilla y León va a ser rápido y podría ver la luz», dijo Suárez-Quiñones.
De cualquier forma, y si el Gobierno materializa su intención de eliminar los peajes de las autopistas una vez que finalicen las concesiones, Suárez-Quiñones estimó que es «una buena noticia» para convertir la AP-1 en una autovía «pública, abierta y libre» cuando finalice el contrato concesional.
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