Los sindicatos CCOO y UGT pactan con la dirección de Lindorff la extinción de 314 contratos

El acuerdo cierra dos meses de litigiosidad laboral después de que la multinacional noruega anunciase un reajuste de su plantilla en España, como consecuencia de dos procesos de fusión que tiene en marcha. La compañía propuso en febrero 449 despidos de una plantilla de 1.717 personas que tiene en todo el país.

Finalmente, el acuerdo contempla un máximo de 314 despidos (135 menos) de los que como mínimo un 50% deberán ser voluntarios. En el caso de Valladolid, de los 147 anunciados se han pactado 92 salidas de las cuales 46 deberán ser voluntarias. Los empleados que decidan irse tendrán hasta el 4 de mayo para comunicarlo a la dirección del centro de La Cistérniga.

El acuerdo contempla 36 días con un tope de 24 mensualidades, una cantidad superior a la que la empresa ofrecía inicialmente, y que era de 20 días y un año como máximo, tal y como establece la reforma laboral de 2012.

Además, Lindorff se ha comprometido a abonar a aquellos trabajadores con indemnizaciones inferiores a los 2.000 euros (alrededor del 80% de la plantilla tiene una antigüedad posterior al 2012), otros 2.000 más, así como otros 3.000 euros para los que perciban menos de 3.000.

Respecto a los criterios para las salidas no voluntarias, el acuerdo incluye la prioridad de permanencia en el puesto de aquellas empleadas embarazadas, las familias monoparentales y de los trabajadores que tengan otro miembro en la familia en búsqueda activa de empleo.

La empresa no estará obligada a aceptar la adhesión voluntaria de aquellos empleados con edad comprendida entre los 50 y 58 años a 31 de diciembre de 2018, fecha en la que se dará por finalizado el ERE. En supuesto de los trabajadores de 59 años, éstos sí podrán sumarse voluntariamente a este procedimiento de despido colectivo.

En este caso, la empresa estará obligada a pagar la cotización del convenio especial con la Seguridad Social hasta la edad de jubilación (ordinaria o anticipada) del trabajador que tenga ese derecho.

El pasado viernes se informó por parte de los representantes sindicales sobre aquellos aspectos del preacuerdo, que suscribieron CCOO, UGT y los tres delegados de Aktua Soluciones Financieras e Inmobiliarias. Los trabajadores se interesaron por las indemnizaciones y la voluntariedad.

El sindicato CGT, con 4 delegados de los 13 que han negociado este ERE, se ha opuesto al mismo, y ha anunciado que lo recurrirá en los tribunales por considerar que las causas organizativas que esgrime Lindorff no son de aplicación para este tipo de despidos colectivos. Además, ha criticado la falta de información para analizar el impacto de estas salidas, así como las condiciones económicas ofrecidas.

La tramitación de este expediente ha conllevado dos jornadas de paro de dos horas por turno, y una huelga de 24 horas en 11 centros que la empresa de recobros tiene en España.