Rechazada la propuesta del PSOE para que el Consejo de Cuentas fiscalice el HUBU en su plan de 2020

La votación ha concluido con nueve votos en contra, correspondientes a PP y Cs, y los siete emitidos por la formación que proponía dicha modificación basada en la convicción de que todo lo concerniente al HUBU es «un proceso oscuro, irregular y plagado de sospechas», en referencia incluso al informe que este partido, Grupo Mixto y hasta Ciudadanos emitieron en la Comisión de Investigación abierta sobre este asunto en sede parlamentaria sobre una infraestructura «equivalente en presupuesto a más de la mitad de la mayor obra pública construida en el mundo, la ampliación del Canal de Panamá», ha denunciado la socialista Rosa Rubio.

En su intervención, con carácter previo al debate y posterior votación, Rubio, en declaraciones recogidas por Europa Press, ha reprochado al presidente de la Comisión la «falta de respeto» el hecho de que el informe elaborado por el Consejo de Cuentas sobre la propuesta haya sido trasladado al PSOE con 24 horas escasas de antelación «y no con las 48 horas que establece el reglamento de la cámara, y eso a pesar de que entró en las Cortes en el mes de mayo».

Ha recordado también que hace un año el presidente del Consejo de Cuentas, el propio Amilivia, señaló no tener inconveniente en investigar cualquier tipo de actuación de la Junta, incluido el Hospital de Burgos«, por lo que ha calificado de «chocante» que ahora el informe traslade lo contrario bajo el argumento de que ha fiscalizado «cachitos del HUBU».

Rubio ha explicado en que la propuesta socialista se ciñe al ámbito de la función fiscalizadora del Consejo de Cuentas y que la misma «no es caprichosa dado que se trata del hospital más caro de Castilla y León, que acabará costando a los castellanos y leoneses mas de 2.000 millones de euros en 30 años, canon de 70 millones al año incluido».

En esta línea, la portavoz socialista ha expuesto que la licitación del HUBU en 2016 por importe de 230 millones ha sufrido modificaciones en su proyecto hasta alcanzar la cifra de 500 millones, más del doble de lo presupuestado inicialmente.

«Todo desmiente al anterior presidente Juan Vicente Herrera, quien dijo que sería más barato, más rápido y que no aumentaría la deuda pública. Ninguna de las tres cosas en verdad», ha criticado Rubio, que ha denunciado las ampliaciones de presupuesto permitidas por la Junta por modificados llegando a compensar con 34 millones a la empresa adjudicataria por su propio retraso en las obras.

«Además, nos endeudamos para prestarle dinero a la concesionaria a la que pagamos por la construcción y por el canon de uso«, ha señalado tras exponer que la Junta pidió un préstamo de 100 millones de euros al Banco Europeo de Inversiones para prestárselo al concesionario del hospital durante su construcción.

«Por coherencia con sus propias palabras, Ciudadanos debería haber votado a favor», ha indicado Rubio, para finalizar reiterando que «el Grupo Socialista no parará de exigir la reversión del HUBU, que sea plenamente público para que el dinero que cada año va a empresas privadas acabe donde debe, en servicios públicos para los ciudadanos«.

Sin embargo, los procuradores del PP y Cs, Salvador Cruz y Blanca Delia, respectivamente, ha justificado el voto en contra a la modificación planteada por los socialistas en el hecho de que, como así han coincidido, la fiscalización del HUBU es una cuestión ya ejecutada por el Consejo de Cuentas desde 2006, tanto en lo relativo a la contratación como otras cuestiones, algo que ha constatado el propio órgano fiscalizador con sede en Palencia.

Pero incluso Cruz ha recordado que incluso el Tribunal de Cuentas ya archivó en su día las denuncias de los socialistas al dictaminar que no hubo ningún tipo de responsabilidad penal ni de otro tipo.

«Es una cuestión que pone de manifiesto que las cosas en Castilla y León están bien», ha resumido el parlamentario del PP, mientras que la representante de Cs ha declinado convertirse en «cómplice» de los socialistas para sacar adelante su propuesta de modificación para fiscalizar algo ya debidamente controlado.