«Planteamos la intervención de manera personalizada para cada uno de los mayores»

–¿Con qué objetivo se creó Fundamay?

–En Castilla y León residen muchos mayores solos en sus domicilios, con escasos recursos económicos, sin apoyos sociales y con enfermedades que les condicionan para realizar las actividades de la vida diaria y les hace vulnerables. Los fundadores, un grupo de profesionales del Trabajo Social, detectaron la necesidad de protección de estas personas y promovieron la constitución de la entidad tutelar para asumir el cargo de tutor de aquellas personas mayores que fuesen incapacitadas judicialmente sin familiares que pudiesen o quisieran ejercer esta función.

–¿En qué consiste la labor de la Fundación?

–Nuestra principal labor es la tutela de personas mayores que residan en la comunidad autónoma de Castilla y León y que hayan sido incapacitadas judicialmente. Además y complementariamente, tenemos un servicio de asesoramiento jurídico en materia de incapacidad y tutela y un programa de voluntariado. Respecto a la tutela, planteamos la intervención de manera personalizada para cada uno de los tutelados teniendo en cuenta sus deseos y los requerimientos de la familia o allegados si los tuviese, ya que existen ciertas situaciones de conflicto que impiden que éstos puedan o deban ejercer el cargo de tutor nombrando el órgano judicial a una fundación. Si el tutelado reside en su domicilio y es su deseo seguir en el mismo, se adapta y acondiciona la vivienda a las necesidades del pupilo y se dota de los apoyos necesarios, como son el servicio de ayuda a domicilio, lavandería, limpieza, teleasistencia o comida a domicilio, todo ello coordinado y supervisado por los profesionales de la Fundación. En caso de que la persona ya esté ingresada en una residencia, todas las actuaciones estarán encaminadas a proveer una mejor atención asistencial en el centro y complementar la misma.

–¿A cuántas personas de Castilla y León tutela la entidad?

–Fundamay ha tutelado a más de 2.400 personas desde su constitución. Actualmente, tiene abiertos 477 expedientes, de los cuales tiene encomendada la protección y defensa de 376 personas, 79 más están a la espera de nombramiento judicial y otras 22 propuestas están en fase de estudio previo.

–¿Qué programas desarrolla la entidad?

–Además del ejercicio tutelar, desarrollamos un servicio de asesoramiento jurídico en materia de incapacidad y tutela y un programa de voluntariado. El asesoramiento jurídico está dirigido a las familias, profesionales o allegados de personas discapacitadas que estén tramitando un procedimiento de incapacitación o que ya ejerzan cargos de tutor, para resolver las dudas que puedan surgirles sobre cualquier trámite judicial. El programa de voluntariado está dirigido a personas comprometidas que desinteresadamente estén dispuestas a prestar afecto y cercanía a los tutelados de Fundamay. Este voluntario está en contacto con los profesionales de la Fundación para un mejor conocimiento del tutelado, garantizando una atención e intervención más acorde no solo con sus necesidades, sino también con sus gustos y preferencias, buscando el bienestar y la felicidad de la persona.

–¿Qué demandaría desde la Fundación a las instituciones?

–Los programas que desarrollamos no son sostenibles sin el apoyo económico de los servicios sociales de la Junta de Castilla y León, por lo que es imprescindible mantener el convenio de colaboración existente. Además, recibimos aportaciones económicas del Ayuntamiento de Burgos, Ayuntamiento y Diputación de Soria, Ayuntamiento de Palencia, Diputación de Salamanca y Diputación de Valladolid en reconocimiento de la labor que desempeña Fundamay en las nueve provincias de la comunidad autónoma.