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El accidente de la avioneta ocurrido este miércoles por la tarde en el aeródromo de Fuentemilanos se produjo por un despiste. Es lo que manifiesta el gerente de las instalaciones segovianas, José Antonio González, quien quita hierro a lo acontecido y afirma que ... este tipo de percances son más habituales de lo que se puede creer fuera del ámbito de la aviación civil.
El piloto en prácticas, que volaba acompañado por un instructor, «se olvidó de desplegar el tren de aterrizaje», apunta el gerente de Fuentemilanos. «Es algo que nos puede a pasar a cualquiera tarde o temprano; de hecho hay un dicho en este mundillo que dice que hay dos tipos de pilotos, los que aterrizan sin tren y los que aterrizarán». Se sobreentiende que sin bajar el tren de aterrizaje.
La avioneta, perteneciente a la escuela Adventia de Salamanca, «no tendría muchas horas de vuelo», intuye González. Sea como fuere, los dos ocupantes «salieron por su propio pie». El gerente confirma que se llamó al servicio de emergencias 112 Castilla y León.
Responsables de la empresa de formación acudieron a Segovia para recoger a los dos pilotos accidentados, que regresaron a Salamanca en la misma tarde de este miércoles tras el reconocimiento médico al que fueron sometidos en las mismas instalaciones del aeródromo. Fueron dados de alta en el mismo lugar del accidente.
Debido al impacto, la avioneta «ha quedado para echarla a la basura», apostilla José Antonio González.
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