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Ha tardado en dejarse notar, pero el otoño ya ha llegado a Castilla y León. Desde primera hora de la mañana de este miércoles, una densa niebla ha condicionado la circulación en varias carreteras de la comunidad. De forma más concreta, el tráfico se ... ha visto afectado en las provincias de Valladolid, Burgos, Palencia y Salamanca, tal y como ha informado la Dirección General de Tráfico y recoge Ical.
En este sentido, las mayores dificultades se han localizado en cuatro vías de Burgos: la N-I entre Miranda de Ebro y Monasterio de Rodilla a lo largo de sesenta kilómetros, la A-62, entre Buniel y Celada del Camino en trece kilómetros y la A-231 en Villalbilla de Burgos y Citores del Páramo.
Asimismo, la niebla también ha afectado a la A-62 en dos tramos diferentes: cerca de cien kilómetros entre Tordesillas (Valladolid) y Herrera de Valdecañas (Palencia) y a lo largo de 35 kilómetros entre La Orbada y Golpejera, en Salamanca. Por último, la escasa visibilidad también está presente en la A-6, entre las localidades vallisoletanas de Medina del Campo y Bercero, en un tramo de 25 kilómetros.
Por otra parte, según recoge la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), para este miércoles se esperan en la comunidad precipitaciones fuertes y persistentes, especialmente en la mitad norte, donde una probabilidad superior al 70% de brumas y bancos de niebla matinales. No obstante, y a pesar del elevado riesgo de lluvia y niebla hasta el próximo domingo, la Aemet no ha activado ningún tipo de alerta en Castilla y León.
Por último, para este miércoles, se prevé una mínima de tres grados en Cuéllar (Segovia), y máximas de 22º C en Salamanca, Miranda de Ebro (Burgos) y Arenas de San Pedro, en Ávila.
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