Muere en Ávila al caerle una teja en la cabeza por el viento

Diversas fuentes del municipio señalan que el fallecido, funcionario del Ayuntamiento de Madrid, ya que residía en la capital con su mujer, se había desplazado al municipio abulense para pasar el fin de semana. Fue hallado muerto en torno a las 19 horas de la tarde por unos vecinos a los que había avisado su esposa al no conseguir localizarlo por teléfono.

Previamente estos vecinos habían llamado a la puerta de la vivienda y, al comprobar que no respondía nadie, accedieron al terreno situado junto a la casa, ya que la esposa del fallecido les había comentado que había acudido al pueblo para limpiar el limonero que se encontraba en ese terreno.

Los hechos se produjeron cuando el finado, con una segunda residencia y familia en Pedro Bernardo, trabajaba en un terreno adyacente a la finca, momento en el que fue golpeado por la teja desprendida por el fuerte viento. Al parecer las tejas se desprendieron del tejado de la construcción, de varios pisos y una altura superior a los diez metros.

Las mismas fuentes señalan que el hombre podría no haber fallecido en el momento, ya que el lugar donde se encontró su cuerpo presentaba indicios de que el hombre trató de arrastrarse para abandonar este emplazamiento.

Tras el hallazgo del cadáver, se dio aviso a la Guardia Civil y a los Servicios de Emergencia, que no pudieron más que certificar su muerte.

El alcalde de Pedro Bernardo ha destacado la conmoción que la noticia ha causado entre los vecinos del pueblo por cómo ha sucedido, de ahí que la festividad de San Sebastián, que tiene lugar este lunes, se esté desarrollando de forma «amarga».