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Alfonso Fernández Mañueco y Francisco Igea escenificaron este viernes la unidad del gobierno de coalición PP-Cs en la Junta, con una comparecencia conjunta para analizar los primeros meses del ejecutivo. El presidente y el vicepresidente de la Junta lanzaron casi al unísono un mensaje ... de estabilidad. «Este es un gobierno para cuatro años con un proyecto para impulsar el futuro de Castilla y León », subrayó Mañueco. «Es un gobierno para cuatro años, que va a durar y que va a transformar la sociedad de Castilla y León», corroboró Igea.
Los líderes autonómicos de PP y Ciudadanos exhibieron su buena sintonía política y personal, después de que el vicepresidente dejara durante los últimos días en el aire la posibilidad de un cambio en el gobierno de la Junta si el PSOE se aviene a un pacto nacional con PP y Ciudadanos para evitar el preacuerdo anunciado entre socialistas y Unidas Podemos. Igea agradeció a «Alfonso» la «excelente relación y hasta su amistad en este momento», apuntó que «del roce surge el cariño» y valoró la importancia «del trabajo conjunto». Mañueco por su parte quiso «corresponder a las generosas y cariñosas palabras de Paco». «He aprendido mucho de él. No somos iguales, pero nos complementamos, con ese carácter de querer mejorar las cosas, no conformarse y ambicionar lo mejor para esta tierra».
El ejecutivo PP-Cs se ha consolidado, a decir de Igea, gracias a las críticas del PSOE. «Nadie ha hecho tanto esfuerzo para cohesionar este gobierno como el líder de la oposición», señaló. El vicepresidente criticó las declaraciones del secretario general autonómico de los socialistas, Luis Tudanca, quien desveló este viernes que Igea le confió, en plena negociación para el gobierno de la Junta, que sospechaba que sus compañeros de partido «le pinchaban el teléfono y le ponían detectives», al tiempo que le pedía «discreción». Igea no desmintió esas palabras, pero recordó que, efectivamente, se trataba de «reuniones discretas». «Reunirse es una práctica habitual. Yo no voy a hacer lo que ha hecho el señor Tudanca. No voy a hablar de lo que él dijo en esa reunión», zanjó.
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El vicepresidente de la Junta consideró que el líder socialista en Castilla y León se muestra «como adivino» al pensar que la reunión que pretendía mantener con él el pasado martes tenía como objetivo apartar a Mañueco de la presidencia Junta, como señaló Tudanca. «Lo que quería era comentarle previamente lo mismo que dije luego en los pasillos de las Cortes. Luego se cruzó un cólico por el camino. El señor Tudanca aparte de indiscreto, es adivino».
Ciudadanos ha soportado más desgaste que el PP en estos primeros meses en la Junta, debido principalmente a la sobreexposición de Francisco Igea. El presidente Fernández Mañueco recordó que se trata de «un gobierno conjunto, sustentado en dos fuerzas políticas» y que los dos partidos son «solidarios para lo bueno y para lo malo». «Puede existir la sensación de que hay una fuerza política [que lo acusa más], pero cuando entramos por la puerta de nuestros despachos, estamos preocupados en el interés de Castilla y León. Somos solidarios en lo bueno y en lo malo con lo que le ocurre al vicepresidente», recalcó Mañueco.
Francisco Igea apuntó que «no hay que confundir las viñetas con la realidad» y corroboró el carácter «solidario» del ejecutivo autonómico «en todas las pequeñas crisis» que ha atravesado. «Pero yo soy el portavoz y todos los jueves me expongo a los medios de comunicacion. Me siento absolutamente respaldado por todo el gobierno y su presidente». El líder regional de Ciudadanos valoró positivamente las «polémicas generadas» en la acción de gobierno. «Eso es señal de que hacemos cosas. Si no, habría muy pocas polémicas».
Para el vicepresidente de la Junta, el gobierno de coalición PP-Cs ofrece «múltiples ventajas», entre ellas, la capacidad para «estimular» a los miembros de los dos partidos en el trabajo, además de generar «un mensaje más amplio». «Es la suma entre experiencia y empuje. Este gobierno aúna ambas. Es verdad que tiene sus desventajas y alguien podría pensar que genera rivalidad, pero no es el caso porque el presidente de la Junta es una persona con capacidad de escucha y, como él mismo dice, con santa paciencia».
Alfonso Fernández Mañueco no quiso explicar si es partidario de buscar un gran pacto nacional entre PP, PSOE y Ciudadanos, como propuso Igea, y recordó que se trata de «planos distintos», ya que uno es «político y otro institucional». «El señor Sánchez debe pensar en el bien de España y si lo hace, ahí encontrará al Partido Popular. La percepción que tenemos todos es que el señor Sánchez ha elegido otro camino y otros compañeros de viaje. Le invitaría a que explore el diálogo y el acuerdo con las fuerzas constitucionalistas por el bien de España», señaló. El presidente de la Junta no aclaró si, llegado el momento, sería partidario de la denominada 'abstención patriótica' para que el PP permita la investidura de Pedro Sánchez sin que resulte necesario el concurso de ERC. «Ahora le corresponde mover ficha al señor Sánchez», respondió Mañueco.
Por su parte, Francisco Igea matizó que «nadie ha planteado ceder», sino que «haya un acuerdo nacional». «Si hay un acuerdo nacional, el PP tiene que estar en él y nosotros [Cs] hemos dicho que no seríamos un impedimento. No se plantea una cesión. Eso está bien para El Intermedio. Hay que llegar a un acuerdo nacional para evitar una situación que puede ser catastrófica para los habitantes de Castilla y León en un gobierno secuestrado por los nacionalistas. Si hay alguien que ha vendido o va a vender a esta tierra a cambio de los castellanos y leoneses, ese es el Partido Socialista», declaró Igea.
En el balance estricto de los primeros cuatro meses de gobierno autonómico, el presidente Mañueco resaltó que «se han tratado ya 420 asuntos el consejo de Gobierno», con mil millones de euros movilizados, y el inicio de la tramitación de 13 leyes. Basó su relación con el gobierno de España en el «autonomismo útil» que ya propugnaba su antecesor, Juan Vicente Herrera. Además, defendió el «diálogo civil, institucional y político» y subrayó «la confianza» que busca en la economía y el empleo, así como el «compromiso con el mundo rural».
El vicepresidente Francisco Igea hizo una loa a la prensa («no hay tierra de libertad donde no hay prensa libre») y asumió las «críticas, comentarios y hasta los ataques» que recibe de los medios de comunicacion. Igea hizo hincapié en la importancia de la consejería de Transparencia, que él mismo dirige. «Nos ha permitido saber cómo se financia desde la Administración a los medios de comunicación, la verdad de las listas de espera y que los ciudadanos de Castilla y León tengan los datos abiertos a su disposición». Además, subrayó el pacto de Sanidad, convocado por la consejería que también está en manos de Ciudadanos, para buscar las «mejoras imprescindibles» para que la atención sanitaria «sobreviva a largo plazo».
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