La Junta usará 651 camas privadas de la región solo para pacientes sin Covid y al ritmo de necesidades

El protocolo es el de aislarlos con mascarilla en un habitáculo ya destinado a estos casos y si la clínica resulta sospechosa de infección será derivado y siempre en ambulancia a través de Emergencias-Sacyl del 112 a un hospital público. En ningún caso se ingresan en el propio centro privado porque la orden de la Consejería de Sanidad es la de concentrar todos los casos en la red de Sacyl y dejar 'limpios' los de las empresas ajenas a la Gerencia de Salud. Pero desde que empezara la alerta, estos centros –indican fuentes de Recoletas– sí han atendido casos, con la «protección adecuada».

Cuando se les envía al hospital público correspondiente ya llevan algunas pruebas, como analítica y escáner, realizadas.

Son 651 las camas privadas que actualmente están a disposición de Sacyl en los 17 centros con camas privadas que hay en Castilla y León. Los cuatro de Valladolid suman cerca de 90 camas. Recoletas tiene dos hospitales –Campo Grande y Felipe II– con 78 y 50 camas respectivamente; el Sagrado Corazón pone a disposición de las autoridades sanitarias 15 de sus 45 y el Benito Menni otras 22, pero este último centro no es de carácter general sino geriátrico y psiquiátrico y de daño cerebral y paliativos.

Según fuentes del sector privado, «por el momento no se harán uso en términos generales de esta dotación y todo apunta a que pueden hacer falta camas o bien hacia el fin de semana o, más probablemente, hacia finales de este mes». Lo que sí está claro es que estos centros solo acogerán pacientes trasladados de los grandes complejos asistenciales sin Covid-19.

La Junta publicó este pasado sábado la orden en el Bocyl que especifica que estos establecimientos sanitarios y su personal así como las mutuas están a disposición de las necesidades que provoque esta alerta sanitaria. Cada gerencia provincial será la encargada de requerir, y lo harán a ritmo de necesidades, las camas que necesite para ingresos de la privada.

Desde el sector también se ha apuntado a Sacyl que sería adecuado contar con los tests de detección rápida para poder hacer esta prueba en los centros privados y, en caso de dar negativo, «ocuparnos nosotros de atender esa neumonía de diferente origen; lo cual ayudaría también a descongestionar la pública». Algo que actualmente no es factible porque aún no han llegado tales pruebas; pero que Sacyl tomará en consideración de cara al futuro.