El turismo asociado al estudio del español gana peso en el inicio de Intur

El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, apostó por un mensaje «positivo» e incidió en la promoción del español como recurso económico y turístico. Un idioma que es la tercera lengua más hablada del mundo, empleada por 548 millones de personas a diario. El presidente apuntó que el pasado año más de 50.000 alumnos extranjeros llegaron a Castilla y León a estudiar español, lo que supuso un 9,3% más que en el 2017. Sin embargo, aseguró que el objetivo de la Junta será más «ambicioso», puesto que a nivel mundial hay 22 millones de personas que estudian español. Este dato se suma al ofrecido por la Universidad de Valladolid, que apunta a récord de estudiantes extranjeros este curso, para el que se esperan más de un millar.

Mañueco, que en su primer paseo institucional por Intur como presidente visitó los espacios habilitados para todas las provincias, se detuvo en Valladolid para observar su apuesta gastronómica, con pastas artesanales o el pan de Candeal.

No fue la única provincia que se sentó 'a la mesa' con lo mejor de su despensa, y fue precisamente este sector el que centró buena parte de la oferta de Ávila, con el chuletón o los caracoles de Arenas de San Pedro, y con la anécdota de la jornada, con un cochinillo que persiguió a la comitiva de representantes institucionales, hasta conseguir la instantánea para el recuerdo.

La propuesta lingüística y la gastronómica, junto a la rural, la cultural o la de naturaleza, entre otras, están encaminadas a conseguir el objetivo de potenciar el turismo de interior. De hecho, Castilla y León se marca alcanzar los siete millones de turistas internacionales en los próximos cuatro años y los 55 millones de pernoctaciones totales en el conjunto de los alojamientos. Para ello, el mercado internacional se antoja «fundamental», de ahí la unión con Portugal, país invitado en esta edición y que compartió protagonismo en el estreno con la comunidad.