Quién es Gonzalo Santonja, el verso suelto de Vox al que Mañueco no cesa

El bejarano Gonzalo Santonja, consejero de Cultura, Turismo y Deporte en la Junta de Castilla y León, una de las carteras de Vox en el gobierno regional que Abascal acaba de romper, se ha convertido en un verso suelto político al que ni Fernández Mañueco, con el que tiene una gran afinidad, ha querido cesra. Se convierte en la cuña con la que el presidente salmantino minimizará los daños de la ruptura.

Tras la decisión de Vox de romper el pacto de gobierno y pasar a la oposición, el exvicepresidente García Gallardo ha expresado su deseo de que los tres consejeros que ha tenido su partido abandonen sus cargos, pero no ha logrado asegurarlo, al menos, no de todos. Veganzones y Dueñas sí se lo han manifestado con claridad, pero el burgalés no ha podido decir lo mismo de Santonja. Y finalmente se ha confirmado que seguirá.

Hijo y hermano de arqueólogos, Gonzalo Santonja (Béjar, 1952) dirigió el Instituto Castellano y Leonés de la Lengua durante casi dos décadas, siempre, con los sucesivos gobiernos del PP. Y su afinidad con Mañueco tiene rango de relación personal: «tiene mi confianza», ha dicho el propio presidente.

En realidad, Santonja es un verso suelto político, no sólo de Vox. Con unos inicios políticos en el extremismo de izquierdas, se convirtió en la propuesta del partido de Abascal para la consejería cultural cuando hubo que aportar consejeros al gobierno con el PP. Un cargo para el que ya sonó a finales de los '90 del siglo pasado, con los populares precisamente.

Ahora Santonja podría convertirse en un verso suelto y desobedecer la orden de Abascal de romper con el PP en Castilla y León. No es afiliado de Vox ni tiene cargo orgánico alguno y no tendría por qué acatar la orden del presidente nacional.

Si rechaza presentar su dimsión como sí hará García Gallardo, sujeto a la disciplina de partido, Santonja podría continuar como consejero; si no obedecer la orden de Abascal, sólo Fernádez Mañueco tendría la potestad de cesarle como hizo en su día con los consejeros de Ciudadanos.

No sería una convivencia extraña, ya que el presidente y el consejero se conocen desde hace años. De hecho, ha ejercido muchos más años en la órbita del PP y de Mañueco que en el partido de ultraderecha.

En junio de 2021, y tras 19 años en el cargo, abandonó la dirección del Instituto Castellano y Leonés de la Lengua por el «clima de hostilidad» desde la consejería de Cultura hacia su gestión. Por entonces, esta cartera estaba en manos de Ciudadanos.

Este instituto funcionaba como una fundación y estuvo siempre financiado y bajo el paraguas de la Junta, que lo tenía adscrito a Cultura. Antes de su salida se supo que se ocultó al patronato que cobraba un sueldo camuflado en una comisión de servicios de la Consejería de Educación, pese a lo cual se le aprobó un sueldo ignorando que ya tenía uno de funcionario en la Complutense. Además, llegó a facturar y cobrar trabajos al propio instituto.

Santonja, catedrático y profesor emérito de la Complutense, ha dedicado buena parte de su tiempo a indagar las raíces del castellano, es gran aficionado a los toros y este es uno de los motivos por los que encajó en el puesto, dado que Vox quería para su entrada en gobiernos autonómicos consejerías que gestionaran la fiesta nacional.

Santonja tomó el cargo en abril de 2022 y se llevó a su equipo a otro bejarano, Enrique Sánchez-Guijo, director general de Deportes. Exatleta y tetracampeón paralímpico y recordman mundial, ya fue concejal en el Ayuntamiento de Salamanca con el PP cuando Mañueco era alcalde y se había alejado de la política.

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