El gasto en gastronomía creció el 10% y dejó 523 millones en la región en 2017

Castilla y León superó el pasado año la barrera de los ocho millones de turistas. Las nueve provincias de la comunidad autónoma sumaron 916.683 viajeros más que durante los 12 meses de 2016. Fueron casi un millón más de visitantes que dejaron más dinero en todas las modalidades de la restauración, según los datos facilitados por la Consejería de Cultura y Turismo de la Junta de Castilla y León.

Los viajeros que se hospedan en los hoteles de tres, cuatro y cinco estrellas son los mejores clientes de los restaurantes de Castilla y León. El 96% recurre a ellos. Además, el 91% de los huéspedes de los establecimientos de turismo rural también elige los locales de restauración para comer o para cenar. Más de ocho de cada diez turistas han comido en un restaurante, bar o cafetería.

Así, los establecimientos elegidos en primer lugar por los viajeros son aquellos que ofrecen menú del día (en el 49% de los casos), seguidos de los bares de tapas (el 44%), los restaurantes con carta (el 39%) y los locales de comida rápida (13%). Eso significa que Castilla y León atrae a mayor número de turistas por su gastronomía de calidad, mientras que se decanta menos por los locales de comida rápida más presentes en otros lugares de España, como la costa.

En efecto, la comunidad autónoma es valorada por su historia, su patrimonio y su naturaleza, pero también por su gastronomía. Los visitantes puntúan con un notable tanto la calidad de la comida y la atención recibida, como las instalaciones y el precio. Los restaurantes reciben una nota media del 7,84, que es superior en el caso de los viajeros que duermen en hoteles de dos, tres y cuatro estrellas.

Precisamente, la Mesa de la Gastronomía, que se reunió ayer, tiene encomendada una continua apuesta por la calidad en el sector. El director general de Turismo, Javier Ramírez, y el comité de trabajo integrado por los representantes de las asociaciones Maestres de Cocina, Asadores, Euro-Toques, Entretantas y Sumilleres, analizaron dos propuestas parar organizar un gran evento de apoyo a León como Capital Española de la Gastronomía, que podría tomar forma en dos semanas.

El pasado año, hubo un mayor número de afiliados en la Seguridad Social. Así, a 13 de diciembre de 2016 había 69.010 trabajadores en el sector de la hostelería, mientras que un año más tarde eran 70.800, con un incremento del 2,6%. En lo que va de año, este porcentaje ha aumentado hasta el 5%, ya que a finales de marzo había 72.045 afiliados en el sector, 3.657 más que en el mismo periodo de 2016.

En cuanto al número de establecimientos hosteleros, León se encuentra a la cabeza con 3.247 bares, 1.224 restaurantes y 313 cafeterías. Castilla y León tiene dados de alta 15.203 bares, 5.810 restaurantes y 1.335 cafeterías, además de siete salones de banquetes. En la comunidad autónoma hay un bar por cada 158 habitantes (1,58% cada mil).

Según un informe de la Federación Española de Hostelería y Restauración (FEHR) de 2017, en España se contabilizaban 101.397 bares para un padrón de 46.557.008 personas, lo que supone que existen 2,8 bares por cada mil habitantes. Pero no todas las ciudades son iguales. Así, León no solo lidera el número de establecimientos de hostelería de Castilla y León, además es la primera capital de provincia española en relación a su población por delante de ciudades como Logroño, San Sebastián, Bilbao, La Coruña, Valencia, Oviedo, Sevilla o Cádiz. En concreto, León cuenta con 5,03 bares por cada mil habitantes. Salamanca se sitúa en segunda posición con 4,22 locales de este tipo por cada mil vecinos y Zamora la tercera, con 4,14. La quinta capital es Palencia, con 3,60 bares por cada mil censados. Por debajo, se encuentran el resto de ciudades de la comunidad autónoma, algunas de ellas con gran tradición de tapas, como Valladolid, que figura en el puesto 16, o Burgos, en el 19. Segovia está en undécimo puesto, Soria se coloca en la posición decimoquinta y Ávila se sitúa en el 41 lugar.