La expectación crece en el XIII Concurso Nacional de Pinchos

Piedras, cajas de ensaimadas, cerámica con forma de serpiente, barquitas, lo que se dice platos, pocos platos se ven en la presentación de las tapas a concurso. Los cocineros llevan a veces al extremo la imaginación a la hora de poner en escena sus propuestas culinarias. También la abundancia de ingredientes apabulla en muchos casos. Por el momento, la fusión es una de las notas destacables de todos los finalistas que han pasado por los set de cocinas de la Cúpula del Milenio, ante la mirada atenta de numeroso público, entre ellos muchos alumnos de escuelas de cocina.

Mientras tanto en los expositores de fuera, bodegas como Cuatro Rayas, Dehesa de los Canónigos, Grupo Pesquera y Valdecuevas muestran sus vinos a los cocineros participantes, ávidos de conocer nuevos productos.

También los expositores de Alimentos de Palencia, Noruega y Perú, este último país invitado, son tres de los puntos más atractivos para los profesionales asistentes.

En la cuidad, hasta 40 bares y restaurantes ofrecen las tapas y pinchos de lis 48 concursantes españoles y de los 16 finalistas del primer Mundial de Tapas, que se desarrollará mañana por la mañana.