Eusebio Sacristán: «El objetivo es llegar a los niños que no tienen cabida en equipos»

-¿Cuándo nació la Fundación y con qué objetivo?

-La Fundación nació apenas retirarnos del fútbol en activo y con la intención de los patronos que formamos parte de ella, que son también Onésimo Sánchez, Víctor Fernández, Javier Torres, Alberto López y el propio Eusebio, de devolver a la sociedad lo que el fútbol nos había dado. Todos compartíamos esa inquietud y lo pusimos en marcha con lo que teníamos a mano.

-¿Qué se pretende con la Fundación?

-En principio, aplicar nuestra experiencia para que no se quedara nadie sin poder jugar al fútbol, para que los niños tuvieran su espacio y su capacidad de poder jugar. Después, se nos fueron ocurriendo más ideas a través del deporte en familia o con discapacitados. Actualmente, gestionamos en Palencia el centro de multiaventura La Roca, que es el motor que tenemos para generar nuestros propios recursos para poder llegar más lejos y al máximo de gente posible. En La Roca hemos pasado de tener 2.000 personas a que hayan pasado 17.000 este año.

-Uno de los proyectos más recientes es la Escuela de fútbol inclusivo, ¿en qué consiste?

-Participan en esta primera temporada 35 niños y niñas. El objetivo es llegar a los niños que no tienen cabida en equipos, ya sea por falta de recursos, por falta de integración social o por temas de discapacidad. Ahora formamos un equipo con todos ellos y entrenamos los lunes en el campo anexo al pabellón de Huerta del Rey de Valladolid con entrenadores de máximo nivel puestos al servicio de quien más lo necesita para aprender. Queremos que la adaptación sea rápida y que la integración se note. Hay niños que juegan muy bien al fútbol y lo único que no tienen son recursos para poder formar parte de un equipo. Ésta es la esencia de lo que se pretendía con la Fundación y las empleadas de los Ceas nos traen a estos niños, que parecía mentira que no tuvieran su espacio para poder jugar al fútbol.

-¿La integración a través del deporte es posible?

-Desde luego, con el deporte y con todos sus valores de superación y de trabajo en equipo en los que tratamos de incidir para que la integración sea absolutamente eficaz. Hay muchísimos ejercicios que dependen de todos, en los que nos damos la mano para funcionar como equipo y saber que cada uno tiene su rol en un equipo en el que todos tenemos cabida. Se trata de sumar todos esos valores que el deporte nos ha dado para que estos niños se sientan importantes y se sientan partícipes de algo que la sociedad les niega. Ponemos un equipo humano y de cariño para algo tan simple como jugar al fútbol.

-Para estos niños, ¿qué supone pertenecer a este equipo?

-En principio, tener un equipo propio, poder decir tengo mi equipo, algo que no han podido decir hasta ahora. Que se sientan partícipes y jueguen en el equipo de la Fundación Eusebio Sacristán. Entrenamos para mejorar nuestra capacidad psicomotriz y para divertirnos, sobre todo. También trabajamos con adultos y tenemos equipos de refugiados que están en Valladolid y hacemos competiciones.

-¿Qué demandaría a las administraciones?

-Echamos de menos tener una instalación para gestionar porque ahorraríamos muchísimo tiempo, esfuerzo y dinero que dedicamos a alquilar instalaciones para hacer todo esto.