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La 'operación Balmis' movilizó al Ejército desde el primer día en el que se declaró el estado de alarma y ha llevado a 3.680 militares a desplegarse en Castilla y León durante las últimas diez semanas para realizar no solo labores de desinfección en ... puntos estratégicos, como residencias de mayores y centros sanitarios, sino también para llevar a cabo labores formativas, sobre todo, entre el personal de los propios centros de mayores para dotarles de herramientas tanto en materia de desinfección como de organización interna a la hora de frenar la propagación del virus. Esta labor, según ha anunciado este martes el delegado del Gobierno, Javier Izquierdo, continuará en las próximas semanas a través de un proceso de formación, que se desarrollará en once puntos de Castilla y León (aún por concretar) del 19 al 30 de junio, con el fin de trasladar a los trabajadores de las residencias y al personal de Protección Civil «lo aprendido durante esta crisis». El objetivo último es «incrementar el dispositivo de lucha contra el coronavirus ante un posible rebrote» y «estar en mejores condiciones de combatirlo y reducir sus efectos si se produce», ha incidido el delegado del Gobierno.
La 'operación Balmis', no obstante, continúa abierta y el personal militar se mantiene a disposición de las autoridades si son requeridos en nuevas misiones sanitarias como las desplegadas hasta ahora en la comunidad, según han querido destacar el general José Rivas, máximo responsable de la IV Subinspección del Ejército, y el teniente coronel José Alberto Barja, jefe del V Batallón de la UME, quienes han realizado hoy un balance de las actuaciones de los militares desde aquel ya lejano 15 de marzo, cuando fueron movilizados para «colaborar en labores de desinfección, inicialmente, y de seguridad ciudadana».
Desde entonces han sido movilizados 3.680 militares (3.500 del Ejército de Tierra y 180 de la UME) y desplegados en las nueve provincias de la comunidad, en las que han realizado hasta ahora 1.788 intervenciones de desinfección, en su mayoría (840), en residencias de mayores. «Inicialmente fuimos requeridos para desinfectar puntos estratégicos como estaciones de trenes y autobuses, hospitales y residencia, pero después nuestra labor se centró fundamentalmente en los dos últimos», ha concretado el responsable de la UME, quien ha querido destacar también que durante este periodo han realizado también labores de formación en esta materia con colectivos de Bomberos, Protección Civil o agricultores, al igual que con el personal de las propias residencias, para «compartir con ellos todo lo aprendido e incrementar así el número de colectivos que pueden realizar este tipo de labores de desinfección».
La UME ha realizado un total de 1.079 intervenciones de desinfección en residencias (600), hospitales y centros de salud (205); así como en dependencias policiales (60), estaciones (29) o prisiones (4), en Castilla y León. El Ejército, por su parte, ha realizado 709 misiones más de deesinfección, 240 de ellas en centros de mayores.
Los militares, además, han realizado 780 misiones de seguridad ciudadana en 155 localidades y carreteras de la comunidad «dando apoyo a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado», según ha resumido el general José Rivas antes de añadir que su labor ha ido más allá, como el montaje de un hospital de campaña en Segovia o la colaboración con los hospitales Río Hortega y de Medina del Campo en labores de triaje.
El Ejército del Aire, además, ha utilizado las bases áreas de Villanubla (Valladolid), sobre todo, y de la Virgen del Camino (León) para realizar labores logísticas de transporte del material sanitario.
«En estos días hemos demostrado nuestra disponibilidad absoluta al servicio del Estado y de los españoles y también hemos podido compartir las dificultades y los esfuerzos que han realizado los ciudadanos para combatir esta crisis sanitaria», ha querido destacar el general José Rivas antes de lamentar la pérdida de «tantas vidas» y de anticipar que las víctimas de la pandemia «siempre estarán en nuestro recuerdo y en nuestras oraciones».
Los dos mandos militares, muy prudentes, han reconocido que durante esta crisis han vivido situaciones «complicadas», sobre todo, en las residencias de mayores, si bien han querido destacar «el trabajo realizado por su personal, en condiciones muy difíciles, para intentar evitar la propagación del virus». A ellos precisamente irán dirigidos, en especial, los cursos de formación que los especialistas militares impartirán a finales de junio. «Se trata de ayudarles a desarrollar protocolos de actuación ante el virus tanto en la atención de los residentes como en la utilización de los espacios comunes o en su propia protección», ha concretado el teniente coronel José Alberto Barja.
El delegado del Gobierno, Javier Izquierdo, ha querido por último destacar la colaboración durante los últimos dos meses con la administración autonómica y con los ayuntamientos. Eso y agradecer «el esfuerzo realizado por las Fuerzas Armadas» durante la 'operación Balmis'.
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