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El fraude a las aseguradoras se encuentra actualmente disparado a máximos históricos en España. Esta es una de las principales conclusiones del VII Barómetro del fraude en el seguro de autos y de hogar, elaborado por Línea Directa. En él se analizan más de 110.000 intentos de estafa ocurridos entre 2021 y 2022.
Dicho estudio detecta que las estafas al seguro de autos no paran de crecer, ya que el 8,8% de los partes que se declararon al seguro en los dos últimos años fueron intentos de engaños (casi 5 veces más que en 2009). Del mismo modo, se ha publicado un «mapa del fraude en España», recogiendo las provincias con mayor o menor porcentaje de partes declarados al seguro con fines fraudulentos.
A la cabeza de esta cartografía de las estafas se encuentran las provincias de Cádiz (11,6%), Málaga (10,8%) y Cantabria (10%). Estos tres territorios, además, se sitúan por encima del 8,8% de media nacional.
A la cola de la lista, pero liderando la honradez en lo relativo a los partes al seguro de automóviles, se encuentran dos provincias de Castilla y León: Soria (3,4% y empatada con Teruel), y Zamora (4,9%).
En cuanto al perfil medio del defraudador, desde la entidad afirman que se trata de hombres jóvenes desempleados o con trabajos precarios. «Aunque en los últimos años se le ha ido sumando el de un hombre de más de 40 años que realiza estas prácticas para obtener un dinero extra o para no tener que pagar una reparación».
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La estafa más habitual consiste en tratar de incluir en el parte daños ajenos al siniestro, especialmente en el lado derecho del vehículo, siendo más habitual en un coche antiguo (de 11 a 14 años), y generalmente, por la falta de cobertura de la póliza para reparar los daños declarados. Además, los meses de octubre y noviembre y los lunes y los martes son los momentos en los que se producen más intentos de engaño al seguro.
Del mismo modo, en el informe advierten sobre la presencia de redes organizadas. Estos son grupos criminales que intentan cometer fraudes 'en carrusel' a distintas aseguradoras con el objetivo de obtener indemnizaciones declarando lesiones falsas. De media, estas redes están dirigidas por dos o tres cabecillas y suelen estafar de media más de 8.300 euros por caso, 10,5 veces más que el fraude cometido por particulares.
Las redes delictivas organizadas, según detalla el informe, son principalmente activas en la Región de Murcia, donde operan con una tasa 4,5 veces mayor que la media nacional, y seguidas de lejos por Andalucía y Cantabria.
La razón de este incremento generalizado de los fraudes al seguro se debe a motivos económicos. «La actual situación económica, marcada por la reducción del poder adquisitivo de los ciudadanos por la inflación y el alza de los tipos de interés es la principal razón», según afirman desde Línea Directa. Sin embargo,desde la entidad también observan mejoras en los medios de detección de fraude basados en la inteligencia artificial, «lo que permite identificar parámetros, señalar posibles conexiones de los implicados y destapar incoherencias en sus declaraciones».
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