Una cuestión que va más allá del protocolo institucional

Marquínez recuerda que el protocolo sirve «para facilitar las cosas» y subraya una idea que suele repetir a sus alumnos: «Las instituciones están por encima de las personas». «Sí puede suceder que en una reunión entre un ayuntamiento y una comunidad haya intereses contrapuestos, pero siempre deben ser asuntos institucionales. En este caso, sin conocerlo en profundidad, puede que no se haya comunicado bien desde el principio o que las relaciones personales no sean muy buenas y entonces pueda buscarse cualquier excusa para solventar el problema», añade

Para este experto en relaciones públicas, la tensión que se vivió ayer entre el alcalde de Valladolid, Óscar Puente, y el vicepresidente de la Junta, Francisco Igea, trasciende el ámbito de lo protocolario. «No existe un protocolo sobre quién debe o no debe estar en una reunión. Yo como profesional del protocolo lo que busco siempre es limar asperezas y hacer todo lo posible porque nadie se sienta mal. No se trata de que alguien te caiga mejor o peor, sino de que cada uno tenga el lugar que le corresponde».