Castilla y León padece 2.570 incendios y Suárez-Quiñones anuncia que dará explicaciones mañana ante las Cortes

La región ha padecido 2.570 incendios y el año ha sido «muy malo». Ha sido un año de pocas lluvias «con terrenos secos desde el invierno» en los que cualquier chispa podía desatar un incendio «ingobernable». Suárez-Quiñones defendió que el operativo regional contra incendios «es extraordinario», pero con condiciones de 20º grados de temperatura, apenas un 20% de humedad y vientos en algunos casos de 20 kilómetros por hora, los fuegos «son monstruos vivos muy difíciles de controlar».

En los peores incendio de este verano ha llegado a haber 40 medios aéreos simultáneamente y brigadas terrestres trabajando sobre el terreno para trata de «flanquear» las llamas y crear cortafuegos. El consejero alabó el trabajo de los 4.350 personas que han trabajado en extinción de incendios y aseguró que la administración no ha cejado en su empeño de evitar las llamas y de tratar de sofocarlas inmediatamente cuando éstas han prendido.

«¿Es suficiente? Es insuficiente ante el comportamiento humano», explicó. Los incendios «sólo se apagan fácilmente cuando no se provocan». La solución a este problema (en torno al 80% de los fuegos son causados por la mano del hombre) es «más concienciación y educación ambiental. Hay que acabar con esos pactos de silencio en los pueblos, donde nadie denuncia. Hay que hacer algo. Hay que rechazarlos. Podemos decir que el año que viene invertiremos 10, 20 ó 400 millones más, pero ante un gran incendio no hay operativo que pueda acometerlo sin garantizar que no habrá daños».

El máximo responsable regional de Fomento y Medio Ambiente también tocó otros temas de interés relacionados con el medio rural .

Así, anunció un «programa de infraestructuras» en el medio natural «que presentaremos en Salamanca próximamente». La Junta invertirá «26 millones de euros» en equipamientos como parques de aventuras, casas de acogida o miradores para «duplicar» el número de visitantes que reciben las zonas protegidas de la región. El consejero hizo este anuncio ante las críticas de algunos asistentes al Foro, que lamentaron que los pueblos no puedan disponer de algunos recursos propios por estar asentados en zonas protegidas. Los parques naturales conllevan «obligaciones» y la Junta aspira a «equilibrar» esas obligaciones con nuevas políticas de promoción turística y medioambiental.

Finalmente, Suárez-Quiñones adelantó que pedirá «espacios de tranquilidad» a Bruselas para que la UE permita a la Junta «manejar la densidad» de lobos «allí donde no puede coexistir con la ganadería extensiva»