Asaja pide a Bruselas que no permita que la expansión del lobo «acorrale y expulse a los ganaderos»

La organización profesional agraria Asaja-Castilla y León ha pedido a la UE que admita un control «más flexible» de la población del lobo en esta comunidad autónoma, para evitar que esta especie depredadora «acorrale y expulse a los ganaderos de los pueblos en los que siempre han vivido».

Ante la reunión que esta mañana celebran en Bruselas responsables de la UE y el consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, Asaja lamenta cómo a su juicio en las instituciones comunitarias «se celebra como un hecho positivo el crecimiento de los censos de lobos en Castilla y León», explica en un comunicado.

Esta especie salvaje «cada vez amplía más su presencia más allá de las zonas loberas e irrumpe en áreas de ganadería de extensivo tradicional, haciendo imposible el manejo y dejando sin su medio de vida a la poca población que vive en esos pueblos».

Ampliar

Cada año, según esa organización profesional agraria, se producen cerca de 2.000 ataques a la ganadería, «muchos de ellos ni siquiera denunciados por el hartazgo de los ganaderos y las complicaciones para recibir compensaciones».

Por esta razón, Asaja ha insistido en la necesidad de «frenar la proliferación de manadas» y solicitado de la UE «una mayor flexibilidad a la hora de adoptar medidas de control por parte de la administración regional».

La organización ha reclamado, por otra parte, la necesidad de revisar y actualizar los baremos de indemnización por especie ganadera, «ya que hoy por hoy no compensan las pérdidas realmente sufre la explotación».

En la actualidad, según los cálculos de Asaja, existen alrededor de trescientos expedientes de ataques comprendidos entre finales de 2015 y mayor de 2016 «que aún no han sido abonados» y suponen alrededor de 200.000 euros pendientes de indemnización.