Más de 50.700 jubilados de Castilla y León cobran dos pensiones

Este colectivo (931.591 personas en toda España) incluye solo a quienes perciben ambas prestaciones de la Seguridad Social y no a quienes reciben una cantidad mensual adicional en virtud de las aportaciones que hayan realizado a un plan de pensiones privado, o a quienes cobran alguna cantidad de un país extranjero por haber trabajado como emigrante.

La relación que existe entre el número de pensiones contributivas que abona el sistema y el de pensionistas que las reciben es muy parecida en la comunidad y en el conjunto de España y se sitúa en 1,10, con una proporción algo mayor en el caso de las mujeres (1,17) que en el de los hombres (1,03).

Por norma general, las pensiones de un mismo régimen (el General para los asalariados, el RETA para autónomos, el Especial Agrario, etc.) son incompatibles entre sí cuando coinciden en un mismo beneficiario a no ser que, según explica la Seguridad Social, legalmente se disponga lo contrario. Por esta incompatibilidad, quien tuviera derecho a dos o más pensiones debe optar por una de ellas. Ahora bien, el organismo considera como excepción la pensión de viudedad y, por otra parte, la incompatibilidad no rige cuando las pensiones son otorgadas por distintos regímenes.

Entre los casos extraordinarios de pensionistas con dos pensiones, en torno al 70% son beneficiarios de jubilación y viudedad, mientras que cerca del 20% perciben prestaciones de viudedad e incapacidad. Además, se incluyen aquellas personas que cuando les llega el momento de la jubilación están dadas de alta en dos regímenes de la Seguridad Social (por ejemplo, si compatibilizan un trabajo por cuenta propia con otro a tiempo parcial por cuenta ajena) y en los dos cumplen las condiciones mínimas para recibir la prestación. Es decir, haber cotizado, al menos, 15 años en ambos regímenes.

En el supuesto de que no se esté en situación de alta laboral en los dos regímenes de la Seguridad Social en el momento de llegar a la edad de jubilación, entonces se exigen 15 años de cotización simultánea para acceder a las dos prestaciones. No vale que sean sucesivos, sino que la contribución tiene que haberse realizado al mismo tiempo durante esos 15 años. De esta manera se perciben lo que se denomina 'pensiones concurrentes'.

Como puede imaginarse, a quienes reciben dos pensiones se les aplican ciertos límites en la cuantía a percibir en total, ya que en ningún caso, la suma de las pensiones puede ser superior a la pensión máxima de cada ejercicio (2.820 euros mensuales, o 39.469 anuales en 2022). «Cuando la suma de las cuantías es superior al importe determinado para la pensión máxima, se reducirá proporcionalmente la cantidad de cada una de las prestaciones», según explican desde el Instituto BBVA de Pensiones.

La pensión de viudedad es compatible con cualquier actividad laboral, así como con una prestación de incapacidad temporal, el subsidio de maternidad o la prestación por desempleo. También con la pensión de jubilación, siempre y cuando la persona alcance la cotización y edad necesarias para poder reclamarla.

Aunque en principio ambas pensiones se pueden cobrar a la vez, existen una serie de supuestos que las hacen incompatibles. «Es el caso de las prestaciones que están sujetas al Régimen Especial de la Minería del Carbón y superan cierto importe. Tampoco es posible compatibilizar las pasiones del Seguro Obligatorio de Vejez e Invalidez (SOVI) con otras ventajas logradas en otros regímenes. Y si la pensión de jubilación tiene una cuantía que alcanza los topes marcados legalmente no se puede acceder a la de viudedad», señalan desde Mapfre.

La Seguridad Social ha añadido en junio en la comunidad un complemento a 153.967 pensiones contributivas que no llegaban al mínimo legal. Son exactamente la cuarta parte (25%) del total, una cuota mayor que la media del conjunto de España, donde el complemento se ha situado este mes en el 22,2%, es decir, 2,2 millones de personas. Este año, la pensión mínima de jubilación para una persona mayor de 65 años con cónyuge a cargo es de 810,60 euros al mes; mientras que en el caso de la pensión de viudedad con cargas familiares, la pensión mínima establecida es de 759,90 euros/mes.

Se trata de una situación que afecta mucho más a las mujeres (32%) que a los hombres (18,2%). Y que es más grave en unas provincias que en otras, con Zamora como la más necesitada de complementos de toda España. Lo reciben el 39,2% de las pensiones zamoranas (y nada menos que el 45,5% de las mujeres), mientras que Burgos marca el mínimo de la comunidad, con el 18,9%.