Un penalti con el tiempo cumplido mantiene vivo el sueño del play off

Los de Jon Pérez Bolo, dirigidos por Pablo lago al estar cumpliendo el técnico su segundo partido de sanción, salieron mucho mejor plantados al césped de El Plantío y dominaron la pelota desde el pitido inicial. Con Joni Montiel en el once inicial, el Burgos CF se mostró mandón en los primeros compases. En la primera jugada del choque puso ya el ¡uy! en la grada Fer Niño remató con la derecha desde el centro del área obligando a Jokin Ezkieta a estirarse para atajar el balón casi sobre la línea.

El propio Joni Montiel volcó el peligro por la banda derecha, pero se enredó demasiado en filigranas innecesarias que no obtuvieron resultado. Sin embargo, el Burgos CF se gustaba y dominaba. Fruto de ese dominio llegó antes de que el cronómetro alcanzase el minuto diez el primer gol del encuentro. La insistencia de Fer Niño tuvo premio, le permitió ganar el esférico en largo en una segunda jugada con la que pudo correr él y Ander Martín, al que se la dejó para que la pusiera con la izquierda desde fuera del área sin que el cancerbero visitante pudiera hacer nada por atajarla.

Con el gol el ritmo del encuentro bajó unas revoluciones, pero el dominio siguió siendo local. A pesar de ello, el Racing no renunció a nada y fue poco a poco intentando estirarse, aunque sin hacerse con el control y el dominio del encuentro. No les hizo falta, en el minuto 23 un mal ajuste en la defensa del Burgos CF les sirvió para empatar la contienda.

Mboula puso el balón al centro del área donde Juan Carlos Arana le estaba esperando. El remate lo sacó Caro, pero el rechazo volvió a caerle al delantero racinguista tras un desajuste en las marcas entre Atienza y Álex Sancris, que le permitieron rematar solo, y fusilar con la derecha desde el lado izquierdo a Caro.

Tras el empate el partido entró en una fase de correcalles en el césped y de incidentes en las gradas, donde hasta en cuatro ocasiones fue necesaria la intervención de la Policía Nacional para poner fin a los empujones y conatos de peleas. Casi una decena de aficionados visitantes fueron desalojados.

En el césped siguió el encuentro de ida y vuelta, con poca precisión por parte de ambos conjuntos. Y sin estar brillante, el Burgos CF tuvo una buena oportunidad en las botas de Álex Sancris que remató en el interior del área un balón puesto por Curro Sánchez que a punto estuvo de convertirse en el segundo gol local. Pero no hubo tiempo para mucho más antes de que el colegiado señalara el camino de los vestuarios.

Tras la reanudación cambiaron pocas cosas, el partido siguió siendo de ida y vuelta, con muchas carreras pero poca calidad. Podía pasar cualquier cosa en el césped de un Plantío que era un hervidero y cuyos contendientes amenazaban ambas áreas. En esas estaban ambos conjuntos cuando llegó el segundo del Burgos CF.

La jugada, coral, comenzó con un pase en profundidad de Caro, que luego se tornaría relevante. Tocó la bola Álex Sancris para ponérsela a Joni Montiel que se la dejó a Fer Niño que batió al portero del Racing. Cuando se celebrara el 2-1 en el estadio el VAR llamó al colegiado para avisarle de que en el nacimiento de la jugada, cuando Álex Sancris tocó el balón, este se encontraba en fuera de juego y, por lo tanto, el tanto no subió al marcador.

El intercambio de golpes siguió en ambos campos, con idas y venidas, con situaciones de peligro para ambos conjuntos, pero sin demasiado tino para ninguno de los dos conjuntos. La más clara la tuvo Dani Ojeda, al que el charcho en la frontal del área provocado por un aspersor estropeado impidió controlar bien el esférico. A pesar de ello, se rehízo para ponerle el balón a Matos, que remató duro haciendo que Jokin Ezkieta tuviera que emplearse a fondo para enviarla a córner.

Los minutos fueron pasando para desesperación de unos y de otros, que empujaban como podían para aportar su grano de arena desde la grada o el banquillo. Pero los nervios se fueron adueñando de ambos equipos, que querían sumar de tres, pero no querían perder tampoco el punto cosechado que les mantuviera vivos en la lucha por el play off.

Todo hacía indicar que el partido iba a terminar con el empate a 1, pero el Burgos CF tenía otro plan. Matos filtró el balón entre los centrales y Curro se cuela bien entre ellos. El charco, que anteriormente había perjudicado a los blanquinegros, se puso de su lado para que pudiese controlar la pelota. Germán llega pasado de fuerza y le arrolla. EL defensa visitante pide fuera de juego en la jugada pero el árbitro, ratificado por el VAR, señala el punto de penalti.

Con el tiempo cumplido es Curro quien agarra el balón para batir a Jokin Ezkieta, que no pudo más que lamentarse del gol recibido. Y no hubo tiempo para más, solo para mantener prendida la mecha del sueño de que el Burgos CF pueda volver a jugar en Primera.