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Quien sí estaba contento tras el derbi era Joseba Etxeberria, que explicaba en sala de prensa sus impresiones sobre el mismo: «Ha habido dos tiempos. En el primer tiempo han pasado pocas cosas, estábamos ofreciendo sistemas de juego emparejados y no hemos podido encontrar esa ... fluidez que solemos tener en Anduva. Apenas hemos sufrido en ese primer tiempo, pero hemos querido darle una vuelta más en el descanso, intentando llegar entre líneas, hemos modificado un poco la posición de Roberto López para poder buscar la espalda de los dos medioscentros de ellos y, a partir de esos movimientos, hemos ido encontrando situaciones».
Tras la reanudación llegó el gol del Burgos CF de manera «tempranera». «Hemos empatado de seguido, el equipo ha creído, hemos podido hacer el 2-1 y hemos tenido transiciones en las que creo que hemos podido hacer más daño. En esa última decisión no hemos acertado, pero estoy contento porque el equipo se vacía, cree en lo que hace y estamos un poquito más cerca», explicaba.
Si embargo, el técnico rojillo no se ve salvado todavía porque cree que «los de abajo van a arrear». «Todo el mundo tiene que estar alerta porque hasta que las matemáticas no te aseguren estar en el fútbol profesional hay que apretar», insistía.
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Ruth Rodero
A pesar de que «el primer tiempo ha sido muy táctico y han pasado pocas cosas», y que al Mirandés le costase llegar, «el segundo tiempo ha sido todo lo contrario». Se han dado «más situaciones de partido abierto», y en el «intercambio de golpes» el Mirandés se ha visto beneficiado «porque el ritmo y la velocidad del partido iba en aumento».
«Lástima no poder encontrar una de las transiciones para poder hacer el 3-1 y sentenciar. Pero creo que el equipo ha hecho un trabajo muy grande. Hemos tenido que hacer un cambio en el descanso porque Prados ha probado y no podía y, como decía en la previa, es un partido de más de tres puntos porque en lo anímico nos va a dar mucha seguridad. Todavía nos queda mucho, la gente va a apretar y tenemos que seguir así», repetía.
Y a pesar de la cautela, el entrenador se iba contento porque consideraba que «en el global del partido» su equipo ha sido «mejor». «Sabíamos que íbamos a tener que hacer un partido muy completo para ganar y así ha sido. Estamos muy contentos, siempre que ganas un derbi la satisfacción es mucho mayor», explicaba.
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En cuanto a uno de los jugadores más destacados del encuentro, Raúl García, Etxeberría tenía una explicación clara para su actuación: «Es que es muy bueno». «Es un delantero centro moderno, es muy buen rematador dentro del área, pero a 40 metros del área también es peligroso, y en situaciones de uno contra uno, también. Lo que más valoro, además de lo que todo el mundo ve, es su esfuerzo diario, es titular indiscutible en el Mirandés pero entrena como si fuera a ganarse el puesto», aseguraba.
Etxeberria quería mandar un mensaje de calma a todos los rojillos: «Todavía vamos a tener que ganar más de un partido y la próxima oportunidad es Andorra, que vemos el nivel que está dando, está haciendo partidos muy buenos. Sabemos que vamos a tener que preparar ese partido a conciencia, es uno de los equipos que más y mejores cosas hace con balón y nos va a exigir mucho. Estamos un poco mejor, porque a pesar de que la distancia con el descenso es la misma queda una jornada menos y hemos metido en ese jaleo a más equipos».
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