Calero: «Hay que hacer que a la gente le dé envidia el derbi de Burgos»

«Hay una cercanía, una pasión, hay un día a día entre los vecinos de Miranda y los de Burgos en los que el que gana tiene ventaja psicológica para poder vacilar al que pierde, ¿no? Es el día a día de la gente en el bar, en la calle... Es un partido diferente. Los puntos son los mismos, pero a nivel psicológico, pasional y de fortalecimiento de tus posibilidades a partir de ahí marca un antes y un después», insistía. Calero recordaba entonces lo que ocurrió en el partido de ida, cuando en el minuto 28 expulsaron a Caro: «Terminamos marcando en el descuento, hubo una explosión de júbilo, eso empujó al equipo a seguir hacia delante y probablemente ha sido una de las situaciones que ha provocado que el equipo en la primera vuelta estuviera tan por encima de lo esperado. Vamos a ver si este derbi nos da fuerzas para los partidos que nos quedan por jugar, que todavía tenemos muchas cosas que decir«.

Julián Calero quiso recordar también que el año pasado el Mirandés ganó el partido en Anduva «muy justamente». «Tienen un perfil de jugadores jóvenes que es como un filial con experiencia», indicaba el entrenador. «Tienen la alegría, la soltura, la decisión de un equipo filial, pero tienen ese puntito de experiencia en algunos jugadores y en algunas líneas. En general no son jugadores de 18 años. Lo que hacen es fisionar la capacidad con el desparpajo y el poso. Vienen de ganar en el Ciudad de Valencia haciendo muy bien las cosas y tienen la moral por la nubes», resumía.

Reconocía también el técnico blanquinegro que en la segunda vuelta no están saliendo las cosas como les gustaría: «Sabemos que la segunda vuelta está siendo mucho peor a nivel de puntos que la primera, eso es una evidencia, no hace falta ser muy inteligente para saberlo, es verdad también que hemos llegado ya a los 50 puntos, que es un éxito».

Analizaba el entrenador madrileño el juego del Mirandés, que lo hace un ritmo muy alto y que con balón «genera mucha incertidumbre». «Nosotros también somos un equipo que estamos acostumbrados a trabajar a intensidades muy altas, que nos manejamos muy bien en todas las situaciones y que el ritmo alto de un equipo se puede contrarrestar. Tenemos que meter el partido en el ritmo que a nosotros nos interese», avisaba.

Calero aseguraba que lo que quiere el equipo es ganar el partido para poder seguir manteniendo la ilusión por el play off, «para no tener las últimas jornadas sin jugarnos nada», aseguraba. Y no quiso olvidarse también de la mesura que debe acompañar a la pasión: «Somos todos burgaleses, unos y otros. Somos hermanos, y los hermanos pueden tener diferencias, las diferencias son que unos son de unos y otros del otro y que unos quieren que gane su equipo y otros que gane el suyo, pero somos hermanos y los hermanos no se pegan. Hay que hacer que a la gente le dé envidia el derbi de Burgos».

El técnico blanquinegro ha celebrado que Grego Sierra haya podido entrenar esta semana completa con sus compañeros, aunque los primeros días lo hiciera de manera parcial. Sin embargo, y a pesar de recuperar algunos efectivos, el Burgos CF tendrá bajas importantes en la medular, como son la de Elgezabal y Atienza. «Solo hay que ver los minutos que han jugado, que son dos mil y muchos, para ver que son jugadores importantes para nosotros», indicaba. «Cuando tenemos tanta acumulación de tarjetas y vamos tan justos en determinadas posiciones, porque el mediocentro es una posición que tenemos un poco justa debida a las lesiones de larga duración de Andy y Javi Pérez la tenemos un poco más limitada de efectivos», recordaba. El míster contará con los jugadores del filial Marina y Saúl del Cerro para este partido.