El Burgos CF sucumbe ante la mejor versión del Alavés

Chispeante. Como las burbujas del champán descorchado hace apenas unas jornadas para celebrar el nuevo año. Así comenzó el partido entre el Deportivo Alavés y el Burgos CF. Un partido sin descanso que en los cuatro primeros minutos del encuentro se saldó con una falta por minuto y una tarjeta amarilla para el jugador del Alavés Tenaglia después de hacerle una falta a Matos.

Aunque el Alavés se asomaba ala balcón del área blanquinegra los burgaleses también quisieron dejar su huella en los dominios de Sivera. La primera acción peligrosa de los hombres de Julián Calero llegó en las botas de Matos, que condujo el balón por la izquierda, se la dejó a Curro que levantó la cabeza para colgársela a la cabeza de Mourdad para que este rematase. Pero la jugada estaba invalidada por por fuera de juego.

No tardó nada en dar respuesta el Alavés. La réplica llegó con una doble ocasión de Miguel de la Fuente. La primera la tuvo que despejar Caro, mientras que la segunda se marchó fuera tras tocar en la defensa y el palo.

Volvió a poner a prueba los reflejos de Caro Miguel de la Fuente, que le hizo estirarse con un lanzamiento cruzado y que el portero blanquinegro despejó a córner. El Alavés dominaba y el Burgos se defendía con seguridad, cómodo en el choque a pesar de que las ocasiones estaban llegando del lado local.

Guridi, Salva Sevilla, Luis Rioja y Miguel de la Fuente estuvieron muy móviles para hacerse hueco entre la defensa castellana. En el minuto 29 a punto estuvo de llegar el primero gol, pero Caro volvió a hacerse grande para tapar la portería. Alkain remató a puerta desde fuera del área tras un saque de esquina y Caro la despeja cuando ya se colaba gracias a una mano izquierda salvadora. Una parada de mucho valor teniendo en cuenta que el cancerbero tuvo que rectificar la posición pues caía hacia el lado contrario.

Esta parada de Caro animó a los suyos, que decidieron probar fortuna de nuevo y obligaron a Sivera a demostrar que él también las sabe parar. Benavidez paró el ataque burgalés con una falta por la que vio amarilla y ahí comenzó el peligro. Curro botó desde la lateral el balón para que Córdoba rematase de cabeza obligando al cancerbero vitoriano a sacar una manopla salvadora cuando los aficionados desplazados del Burgos CF paladeaban el primero de los suyos.

El partido continuó a ritmo trepidante y no hubo minuto en el que no pasara algo. Intenso y veloz, el Alavés dio su mejor cara, el Burgos, por su parte, demostró por qué es el equipo menos goleado de la competición. Así, los de García Plaza siguieron en su asedio y a punto estuvieron de abrir la lata. En el minuto 37 Salva Sevilla puso un centro milimetrado que Jon Guridi cabeceó al travesaño. El gol rondaba en estos minutos finales de la primera mitad.

La última fue para los babazorros. De nuevo Caro se puso el traje de súper héroe para sacar de nuevo una mano, esta vez la derecha y sacar el disparo lejano de Benavídez, que tocó en la defensa burgalesa para envenenar el lanzamiento y obligar a Caro a despejar con una gran estirada. Sin tiempo para mucho más los equipos se fueron a vestuarios.

Tras la reanudación, el partido comenzó igual de movido que en la primera mitad. El Alavés dispuso de una falta peligrosísima que botó Salva Sevilla y que impactó en la cara de Córdoba, que tuvo que ser atendido. El Alavés salió volcado sobre el campo burgalés, un remate de Miguel de la Fuente se fue a córner tras tocar en Areso, después, de nuevo Caro tuvo que sacar una manopla salvadora. Luis Rioja condujo por la derecha el balón hasta llegar a la frontal del área, donde se acomodó el balón para lanzar. Caro, tapado por los suyos, apenas pudo ver el esférico antes de enviarlo a saque de esquina.

El Alavés siguió intentándolo, mientras el Burgos CF no conseguía asomarse al área de los locales. Y fruto de este dominio llegó el gol de los vitorianos. Fue en la jugada menos bonita del encuentro, porque de todas las ocasiones que el Alavés tuvo anotó la menos estética. Pero los goles valen igual. Salva Sevilla centró el balón y Abde, entre las piernas de los defensores burgaleses metió la punterita de la bota para que se colase el balón en la portería defendida por Caro.

Y aunque se adelantaron no dejaron de intentaron. A punto estuvieron de anotar el 2-0 apenas unos minutos después. De nuevo desde fuera del área, de nuevo Salva Sevilla y de nuevo Caro y sus manoplas para demostrar que es el portero más en forma de la competición.

El Burgos CF concedió muchas ocasiones de gol, hasta 23 tiros, siete de ellos a puerta, realizó el Deportivo Alavés en el encuentro, pero siguieron intentando crear peligro hasta el final del encuentro. Y tuvieron una última oportunidad. En el añadido, un disparo de Curro toca en la espalda de un defensor pero no desvía el lanzamiento lo suficiente como para que se cuele en los dominios de Sivera, que detiene el esférico.

No hubo tiempo para más y el Deportivo Alavés sumó los tres puntos en un partido en el que puso el peligro y las ocasiones ante un Burgos CF que no encontró la manera de sacudirse el dominio para poder jugar al ataque como le gusta.