El Burgos salva la categoría sufriendo hasta el final

El inicio del encuentro fue frío y ninguno de los dos equipos era capaz de dominar el centro del campo, aunque era el filial del Celta el que trataba de tocar más el balón y el Burgos aprovechaba los errores célticos para contratacar

En la primera ocasión clara, Undabarrena acertó a rematar desde dentro del área un balón suelto y adelantó a los locales. Poco después, y ante el desconcierto vigués, Chevi remató fuera de cabeza en otra buena ocasión. El Celta lo intentaba desde fuera de área con sendos remates de Ibán, aprovechando que el sol le daba de cara al meta Saizar, pero el portero vizcaíno no tuvo problemas en blocar. Poco después fue Kevin para el Burgos el que remató fuera desde la frontal otra pelota mal despejada por los gallegos.

Y en el minuto 28, Chevi, de cabeza, cruzaba a la salida del meta Iván un balón centrado con maestría desde la izquierda por Kevín. El Burgos había encarrilado en media hora el partido sin hacer nada del otro mundo, debido a las facilidades defensivas de los vigueses y al acierto de los locales.

El partido siguió sin un claro dominador, aunque el Celta tenía más tiempo el balón en los pies, pero apenas sin profundidad. Hasta que en el minuto 43, el colegiado pitó un riguroso penalti de Adrián Cruz sobre Alex. La suerte se alió con el Burgos y Saizar despejó con los pies el lanzamiento de Ibán.

En el comienzo de la segunda parte, los locales le cedieron el cuero al Celta para aprovechar la contundencia defensiva y lanzar contragolpes. Los vigueses continuaron fieles al guion de salir con la pelota controlada desde la defensa, con mucha posesión y toque, pero sin profundidad. El Burgos, bien colocado, defendía, pero cada vez más cerca de su portería. Los locales, también fieles a su guion, sólo atacaban con juego directo o, aprovechando los robos en la línea de medios volantes gallegos, con contrataques que terminaban por morir en la frontal del filial del Celta.

Pero los gallegos también aprovechaban las pérdidas del Burgos y en el minuto 59, una providencial puntera de Beobide evitó un remate de Bermejo que llevaba olor a gol.

La réplica la puso Fer Ruiz que acabó por estrellar el cuero en el cuerpo de Iván. Y de puerta a puerta. Una mano de un defensor del Burgos al borde del área acabó en una falta que Álex estrelló en la barrera. Las malas mañas del Ibán encendieron un partido de muy poca calidad ante la actitud indolente del colegiado asturiano.

Ese cúmulo de circunstancias le hizo recular aún más al Burgos, que notaba el cansancio. Estévez optó por dar salida a Madrazo por Chevi para ganar oxígeno. Pero quien tomó oxígeno y metió el miedo en el cuerpo fue el Celta. En el minuto 75, Alende aprovechó el único fallo defensivo para soltar un zapatazo que se coló en la meta de Saizar.

Tuvo el empate el Celta en un remate de Pampín en el minuto 80, tras un saque de esquina, y milagrosamente la echó fuera. A partir de ese momento, muchos nervios, nada de juego y emoción. Con el pitido final, tras cinco minutos de prolongación, El Plantío respiró.

La trigésima octava y última jornada de Liga, el Burgos CF viaja al estadio Fernando Torres. La cita, a las 18:00 horas del domingo 19 en tierras madrileñas sin nada en juego para el Burgos; sí se juega ser campeón el Fuenlabrada. Ahora es momento de repensar el futuro de un equipo que ha de aspirar a ser algo más de lo que ha demostrado en esta sufrida temporada.